16/07/2007 - Buenos Aires - El pedido fue efectuado por el fiscal Guillermo Marijuan al juez federal Daniel Rafecas, debido a que la magistrada a cargo de la investigación del caso, María Servini de Cubría, se encuentra de licencia, informaron fuentes judiciales.
El caso estalló hace unas semanas, cuando se halló en el baño del despacho privado de Miceli una bolsa con 100.000 pesos (unos 32.000 dólares) y 30.000 dólares, en billetes que en algunos casos llevaban un etiquetado del Banco Central, según versiones de la prensa local.
La autoridad monetaria no vende divisas a particulares, en tanto que la ministra de Economía dijo que el dinero era para una operación inmobiliaria que se frustró y que en su mayor parte le fue prestado por su hermano.
En Argentina, las leyes prohíben operaciones de compraventa con dinero en efectivo por montos superiores a los 1.000 pesos (320,5 dólares).
Miceli fue ratificada en su cargo por el jefe de Gabinete de ministros, Alberto Fernández, quien aseguró que la explicación de los hechos dada por la funcionaria fue "absolutamente suficiente".
El pasado jueves el fiscal Marijuan inspeccionó las oficinas del Banco Central, donde completó las declaraciones testimoniales de funcionarios de la entidad que aportaron datos a la investigación.
En el extenso dictamen que presentó hoy, Marijuan dijo que "aún cuando los sucesos por el momento constatados distan en algo a los relatados en la primera publicación periodística, todo continúa siendo materia de investigación y por lo tanto ninguna hipótesis de trabajo puede ser descartada en pos del total esclarecimiento de lo acaecido".
Al escándalo protagonizado por la ministra de Economía se sumó la publicación de una investigación periodística que denuncia el desvío de fondos, contratos irregulares y gastos "injustificados" en la Secretaría argentina de Ambiente, conducida por Romina Picolotti, lo cual también fue rechazado por el gobierno.
Las denuncias se producen a poco más de tres meses de las elecciones presidenciales de octubre próximo, que ya sumergieron a los principales candidatos y dirigentes en una intensa campaña con críticas cruzadas. EFE