Linaje de origen dudoso, ya que hay varias posibilidades en su origen.

Por un lado puede que sea una degeneración del apellido Ortiz, con lo que habría que ir a buscar los datos en la grafía original.

Por otro lado, puede ser de origen Francés, del lugar de Orthez, que pasaría a España principalmente por Aragón.

En la actualidad, el apellido se concentra en la comunidad de Madrid.

El dato más antiguo de este apellido lo encuentro en Valladolid, en la persona de Ana Ortez, nacida en Valladolid, en 1521 y que contrajo matrimonio con Gonzalo payan, en la misma localidad, en 1543. Las fechas son aproximadas. 

Caballeros de este apellido pasaron a América, radicando en el S y SO de los EE.UU, en los Estados de Texas, Nuevo México y California, así como en México y Perú.

En 1690, encuentro el expediente con la Relación de Méritos y servicios de Martín Ortez de Velasco, Alcalde mayor de Istepexi.

En 1738, encontramos la relación de méritos y servicios del bachiller Juan José Ortez de Velasco, clérigo presbítero domiciliario del obispado de Oaxaca. Hijo del capitán Martín Ortez de Velasco y de Mariana Ruiz de Torres.

En 1748, también podemos encontrar la relación de méritos y servicios del doctor Pedro Alcántara de Quintana, clérigo presbítero domiciliario del obispado de Oaxaca, que tuvo que presentar referencias de sus antepasados, demostrando que era hijo de Juan de Quintana y de Petrona Ortez de Velasco. Era originario de la ciudad de Antequera.

Entre los años 1587 y 1588 falleció en Lima, Perú, Juan Ortez de Velasco, natural del Valle de Mena, en la provincia de Burgos, según testimonio de las partidas de bienes de difuntos de dichos años del juzgado de la Audiencia de Lima que se envían a España, para los herederos del susodicho Juan.

En noviembre de 1420, mercaderes de Ortez, en el vizcondado de Bearn, en Francia, solicitan a los Diputados de la Generalidad, licencia para exportar azafrán a través de Aragón para no pagar la marca que les impone el Collidor de las generalidades.

En campo de azur, un castillo de plata, con un moro atado a su puerta.