23/03/2008 - Colista en el torneo Clausura 2008 tras cuatro derrotas y tres empates, con sólo tres goles anotados en siete jornadas y acosado por el peligro de perder la categoría, el viejo y glorioso Racing es presa de la desdicha, situación que no deja clara la posibilidad de que pueda ser superada por sus propios medios.
El sábado vencía a Estudiantes de La Plata por 1-0 y en 32 minutos de la segunda parte su rival dio la vuelta al marcador (1-2), el arbitro expulsó a tres de sus jugadores (Matías Sánchez, Adrián Bastía y Maxi Moralez) y su público desató disturbios que provocaron la suspensión del encuentro.
Ahora todo indica que su estadio será clausurado por el Comité de Seguridad Deportiva de la provincia de Buenos Aires, por lo cual el equipo tendría que jugar el próximo viernes ante San Martín de San Juan, otro de los amenazados por la posibilidad de descender, a puerta cerrada.
También es posible que el Tribunal de Disciplina de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) sancione al equipo con la pérdida de puntos.
La hinchada está decididamente en contra de la empresa Blanquiceleste Sociedad Anónima, que tiene a su cargo desde 2001 la explotación del fútbol del club, tras su quiebra en 1999, del entrenador Miguel Micó y de buena parte de sus futbolistas.
Pero los desórdenes del sábado, que pusieron en riesgo la seguridad de miles de aficionados, no fueron provocados por la "barra brava" (grupo ultra), sino por hinchas generalmente pacíficos, lo cual es una muestra de la situación que la entidad atraviesa.
Los socios y simpatizantes, que se han manifestado numerosas veces en Buenos Aires en los últimos meses para que Blanquiceleste se vaya del club y se convoque a elecciones, planean ahora volver a las calles y dirigirse a las oficinas del ex presidente argentino Néstor Kirchner, hincha del Racing, para reclamar su intervención en el asunto.
La última marcha de hinchas reunió a unos 3.000 en los alrededores del edificio del Parlamento y de la AFA. La próxima se efectuará el próximo martes en el barrio porteño de Puerto Madero, donde la policía tiene previsto montar una amplia operación de seguridad.
Informaciones publicadas en esta capital la semana pasada indican que Kirchner tiene la intención de impulsar un proyecto privado para salvar a Racing, que contempla el desplazamiento de Fernando De Tomaso, presidente de Blanquiceleste.
Según el matutino La Nación, Kirchner pretende que De Tomaso sea sustituido por Julio Alak, ex alcalde de la ciudad de La Plata, reconocido simpatizante del equipo albiceleste.
Blanquiceleste, cuya gestión debería finalizar en 2010, tiene problemas económicos y financieros y una petición de quiebra por falta de pago de su contrato, presentada en la justicia por el entrenador Reinaldo Merlo, que dirigió al equipo que ganó la Liga en 2001 y también en 2006-2007.
Los equipos de la Primera División argentina que están en la zona de descenso directo son San Martín y Olimpo, mientras que Gimnasia de Jujuy y Colón disputarían la Promoción. Racing está a un paso de todos ellos, y continúa sin ganar en el Clausura, torneo al que le quedan por delante 12 jornadas. EFE