27/01/2009 - El estudio, que ha sido llevado a cabo sobre una muestra de casi dos millones de equipos demuestra que la infección, desde su origen en China, se ha extendido ya por 83 países, alcanzando niveles especialmente altos en países como España, Estados Unidos, Taiwán, Brasil o México.
“Que de cada dos millones de PC que analices, cerca de 115.000 estén infectados con un mismo ejemplar de malware es algo que no se veía desde los tiempos de los grandes ataques como los de Kournikova o Blaster”, afirma Luis Corrons, director técnico de PandaLabs, que añade: “lo peor es que este gusano aún puede hacer mucho daño, ya que en cualquier momento puede comenzar a descargar más malware en los equipos o propagarse por otros medios”.
Además, los investigadores de PandaLabs han averiguado nuevos datos sobre este peligroso gusano. Algunas de sus variantes estarían llevando a cabo ataques de fuerza bruta para conseguir las contraseñas del equipo infectado y también de las redes internas como las que existen en muchas empresas. La debilidad de esas contraseñas (palabras comunes, nombres propios, etc.) ha facilitado la distribución de este gusano.
Consiguiendo esas contraseñas, los ciberdelincuentes pueden conseguir acceso a la computadora de los usuarios y utilizarlo con otros fines.
“Esto demuestra una vez más la necesidad de establecer contraseñas seguras tanto en los equipos personales como en las redes corporativas, ya que en caso contrario, una infección en un equipo puede extenderse a toda una empresa, dejando todas las estaciones de trabajo en manos de los atacantes”, explica Luis Corrons.
Además, este gusano cuenta con un sistema de ingeniería social muy novedoso para propagarse a través de dispositivos USB: en el menú que aparece en los sistemas operativos Windows cuando introduces un dispositivo USB y que ofrece diferentes opciones (abrir carpeta para ver archivos, reproducir canciones, ejecutar los programas contenidos en el dispositivo, etc.) ha disfrazado la opción de ejecución de programa (que activa el malware) como si fuese la opción de “abrir carpeta para ver archivos”, de tal modo que un usuario que quiera ver el contenido de la tarjeta de memoria, en realidad, estará poniendo en marcha el gusano e infectándose.