4 años sin Fernando Báez Sosa: Preocupación por posibles reducciones de condena a los responsables

Cuatro años después del trágico asesinato de su hijo Fernando Báez Sosa, Graciela Sosa confiesa que el tiempo parece haberse detenido para ella y su esposo, Silvino Báez. La madre lamenta la intensificación de su dolor y teme la posibilidad de que las condenas a los rugbiers involucrados se reduzcan.

En una misa interreligiosa convocada por los padres en la Facultad de Derecho de la UBA, oradores de diversas religiones expresaron sus palabras frente a una audiencia con velas encendidas y carteles exigiendo justicia por Fernando. Graciela se dirigió a la multitud, compartiendo la dificultad de superar las festividades recientes y su desesperación ante la pérdida.

Los padres confían en la justicia que pueda proporcionar el Tribunal de Casación Penal bonaerense, encargado de resolver las apelaciones presentadas por los abogados y la fiscalía. Mientras esperan el fallo, Graciela y Silvino expresan su angustia constante, afirmando que no encontrarán paz hasta que se haga justicia por su hijo.

Silvino Báez, padre de Fernando, destaca la tristeza persistente y su determinación de seguir luchando por la justicia. Desestima los rumores de posibles reducciones de condena, insistiendo en la responsabilidad de los involucrados en el crimen.

En medio de la espera, Graciela subraya la necesidad de una justicia ejemplar y revela la difícil situación emocional que experimentan. La pareja espera que el dolor de la pérdida de su hijo no sea en vano y que contribuya a un cambio significativo en el sistema judicial.

El crimen de Fernando Báez Sosa, ocurrido en enero de 2020, sigue siendo un recordatorio impactante de la violencia en las salidas nocturnas. Los padres buscan que la memoria de su hijo sirva como un llamado a la acción para evitar tragedias similares en el futuro.

 (Foto: Julián Álvarez/Télam)