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Detuvieron a uno de los agresores del brutal ataque en Colón: Siguen prófugos los otros dos
Un joven de 20 años fue arrestado por la salvaje golpiza a un adolescente de 17 años en las afueras de un boliche. La Justicia bonaerense busca a Gino Ansaloni, hijo del diputado libertario Pablo Ansaloni, y a otro sospechoso que aún no se entregaron.
Hace 19 horas.
La investigación por el violento ataque en patota a Guido Tomás Ruiz, un adolescente de 17 años en la ciudad de Colón, tuvo su primer avance concreto: este miércoles fue detenido Maximiliano Fabián Martínez, de 20 años, señalado como uno de los tres agresores que golpearon brutalmente al joven a la salida del boliche “El Porteño” el pasado 15 de junio.
La causa, caratulada como tentativa de homicidio por la fiscal Magdalena Brandt, incluye también órdenes de detención para Gino Ansaloni —hijo del diputado nacional por La Libertad Avanza, Pablo Ansaloni— y Ignacio Egmami, ambos actualmente prófugos. Según fuentes judiciales, sus defensores han solicitado eximiciones de prisión, mientras los jóvenes estarían fuera de la ciudad a la espera de una resolución del Juzgado de Garantías.
El ataque quedó registrado en cámaras de seguridad y exhibe la violencia ejercida: Guido sufrió fractura de mandíbula, de nariz, pérdida de piezas dentales, traumatismos oculares y múltiples golpes en el cuerpo. Su hermana declaró que “intentaron matarlo” y denunció la indiferencia de quienes lo dejaron inconsciente en el piso.
La figura de Gino Ansaloni generó una fuerte reacción pública por el vínculo político con su padre, Pablo Ansaloni, ex aliado de Sergio Massa y actual dirigente de La Libertad Avanza. El diputado ya había estado envuelto en escándalos por acusaciones de antisemitismo, enriquecimiento ilícito y compra de fueros legislativos, y su entorno arrastra otro hecho sin resolución: el asesinato de su chofer en 2021, en un caso que aún permanece abierto.
La sociedad colonense vive el caso con angustia, señalando paralelismos con el crimen de Fernando Báez Sosa, y teme que el poder político proteja a los responsables. La familia Ruiz exige justicia y acompaña la recuperación médica y psicológica de Guido.