EconomÃa y Empresas | CAME
La industria pyme cerró octubre con contrastes: caÃda anual y leve repunte mensual
La actividad manufacturera pyme descendió un 6,5% interanual en octubre, aunque registró un crecimiento del 4% respecto al mes anterior. El uso de la capacidad instalada subió al 62,3%, el nivel más alto en once meses.
17-11-2024
Un panorama desafiante, pero con señales de recuperación
La industria pyme continúa enfrentando dificultades: en los primeros diez meses del año, acumuló una retracción del 14,5% en comparación con 2023. De los seis sectores relevados por el Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) de la CAME, cuatro mostraron caídas interanuales significativas, lideradas por Papel e Impresiones (-20,6%) y Alimentos y Bebidas (-13,1%).
Sin embargo, octubre presentó ciertos indicios de mejora. A nivel mensual, el sector creció un 4% desestacionalizado, marcando el mayor nivel de producción desde noviembre del año pasado. Además, el uso de la capacidad instalada subió del 60,6% en septiembre al 62,3%, lo que refleja un leve aumento en la actividad.
Sectores más afectados y medidas necesarias
El sector de Alimentos y Bebidas continúa liderando los desafíos, acumulando una caída del 15,6% en el año, golpeado por el descenso en el consumo de productos como cervezas, lácteos y panificados. Por otro lado, Textiles e Indumentaria y Maderas y Muebles mostraron ligeros aumentos interanuales, del 0,2% y 0,3%, respectivamente, apoyados por estabilidad de precios y financiamiento.
Entre las principales dificultades reportadas por las empresas se encuentran los altos costos de producción y logística (39,9%) y la falta de ventas (35,3%), aunque esta última registró una leve mejora respecto a mediciones anteriores. En este contexto, el 61,4% de las pymes considera que una reducción de impuestos es la medida más urgente para aliviar la situación.
Diversificación como estrategia de resistencia
Frente al escenario actual, un 32,2% de las empresas optó por diversificar su producción o incorporar nuevos servicios, buscando adaptarse al contexto de baja demanda y altos costos. Además, sectores como Metal, maquinaria y equipo y productos farmacéuticos comienzan a mostrar señales de reactivación, impulsados por inversiones y mejoras en competitividad.