Escribiendo una canción sin sentido,

Cansada de seguir siendo el mismo,

Arto de que esté mal ser un niño…

Necesidad del silencio,

Una mirada es todo,

Brazos helados que con el tiempo

Se aferran a mi cuerpo poco a poco.

Ni si quiera es soledad lo que siento,

No tiene nada que ver con ese niño tonto,

Me he cansado de decirlo…

Que el problema aquí es otro.

Como no aferrarme a lo que siento

Cuando estoy arto de estar solo,

No se que hacer con este frío intenso

Que habita en este mundo donde no hay reposo.

Donde cada respiro es un logro,

Cada latido una puñalada;

Donde nunca se terminan de partir tus alas,

Donde la vida pierde sentido cada mañana.

Putrefacto ser creado de escoria

Malditos los días que pisaste mi tierra,

Injusto el castigo que trae tu nombre

Perversa la prole que de ti descienda

Hay de ti corazón apasionado

Mira aquellos caminos por los que nos has llevado,

Observa cuánta sangre hemos derramado,

Aunque ha de ser ese, cual motivo, por el que la razón te ha abandonado

Y que hay de ti ser sin nombre?

Dime cuantas veces te haz rendido,

Pues ni una sola a pesar de haber caído

En cada maldito hoyo del recorrido.

Y a tí? No se que decirte viento helado,

Pues por duros senderos me has acompañado,

Y jamás te haz ido de mi lado

Mi fiel compañera del cabellos largos…

No como tu escritor desahuciado

Que solo apareces para aumentar el daño,

Abres las heridas por las que me desangro

Aprovechándote de los momentos en que necesito descanso

Siempre tu… y otro sueño hecho pedazos …las lagrimas no son suficientes