BALADA PARA UNA GAVIOTA (MUERTE DE UNA HEROINOMANA)
Fuiste princesa de una casa bien; 
la unigénita mimama y consentida 
de una familia acuaudalada; 
todos tus sueños e ilusiones 
al instante eran realizados 
sin, siquiera, mirar su precio; 
pero tú te sentías prisionera 
encerrada en tu preciosa jaula 
de oro, esmeraldas y turquesas. 
Un día quisiste probar algo nuevo 
que te hiciera alcanzar esa Libertad 
que, desde siempre, tu anhelabas; 
y, pensaste, que lo habías encontrado 
al sentir como un loco Pegaso Blanco 
galopaba, desbocado, por tus venas. 
El te elevo hasta el cielo, 
té hizo besar las estrelas 
al llevarte a su paraíso; 
pero no quisiste darte cuenta 
de que solo era un espejismo 
y te precipitaste al vació. 
Balada para una gaviota 
que, buscando Libertad, 
sé fugó en un Caballo alado 
que nacía de una jeringuilla. 
Cuando, al final, descubriste 
que, en realidad, te esclavizaba 
quisiste dar marcha atrás; 
pero tu billete había caducado 
y, con las venas quemadas, 
no podías volver al camino: 
estabas al borde del abismo 
y, con los ojos vendados, 
caminabas hacía tu fin. 
Ya todo cambio para tí 
pues, solo podías subsistir, 
pendiente del próximo Pico; 
eras una marioneta sin cuerdas, 
una barquichuela que zozobra 
acosada por la fuerza del temporal. 
Una noche todo lo acabaste 
y, con tinta de Jaco, 
escribiste tu epitafio; 
en un solitario y lóbrego callejón 
con la jeringuilla tatuada en el brazo 
y, el alma. cabalgando entre nubes 
 
A LA MEMORIA DE ALMU QUE HACE 9 AÑOS NOS DEJO 
 
  
COPLILLA A LA MUERTE DEL CAMARON
To Cádiz está de luto, 
to San Fernando llorando; 
porque te has ido, Rey Calé; 
porque te has muerto, Camaron. 
Que te llevo Dios a los cielos 
pa que, en el Tablao de la Gloria 
tú le cantaras por bulerias 
a la madre de Dios; 
pa que el bronce y la miel de tu voz 
la vistieran con bata de cola 
y prendieran una rosa 
entre los cabellos de la señora 
 
  
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