Te sorprendió la muerte, agazapada detrás de un sueño
Te sorprendió la muerte, agazapada detrás de un sueño,
sigilosamente esperó, a que te quedaras indefenso,
sin posibilidad de ayuda, sin que nadie cuidara tu aliento,
cuando apareció el socorro, tu vida ya había sido devorada en exceso.
Del cruel naufragio, sólo diseminados restos
se debatían en el umbral del Finisterre colérico,
todo quedó atrás abruptamente, en un momento,
como si todo formase parte de un mal sueño,
de golpe desaparecieron tus años venideros,
solo quedan recuerdos y un miserable desconsuelo.
No te besé papá
Hoy casi dos años después, ese recuerdo me invade
no con resquemor, quizás con pena,
tal vez mi subconsciente me quiso ahorrar
la mala sensación del beso que le di a mi abuela,
aún sus mejillas de sabor a mármol
recorre mis entrañas
y no quise, que se fuese
mi último recuerdo de tu cuerpo,
ya abría mis carnes el frío de tus manos;
mi pecho abierto por la impotencia
ante la iniquidad de tu muerte me paralizada,
solo veía que estabas ausente,
¿ Dónde ya estabas papá ?, aún de cuerpo presente.
{ Página Anterior } { Página 26 de 35 } { Próxima Página }
|