4/3/2014 - Televisores LED vs OLED, y una luz de diferencia

Las líneas de televisores modernos ya pasaron la barrera de buscar una buena definición de imagen y, en algunos casos, la disputa ahora es cómo alcanzar la mayor delgadez del producto con más brillo y menos consumo. En este sentido, durante el último evento tecnológico que se dio en Las Vegas el año pasado (CES 2013) las pantallas curvas, ultra finas y gigantes fueron los protagonistas del salón de exposiciones. Es en este escenario donde las condiciones LED y OLED comienzan a estar en boca del usuario.

¿Cuál es la diferencia? Para un usuario común, y a simple vista, no tienen nada que envidiarle una pantalla de otra, sin embargo la tecnología aplicada en cada caso es muy distintiva. Los televisores LED son en verdad televisores LCD que se valen de la retroiluminación de las luces colocadas en panel, mientras que los OLED son electroluminiscentes, es decir que los píxeles son productores de luz y por tanto no requieren luces en panel, de esta manera generan otro tipo de consumo y se pueden adaptar para crear pantallas super delgadas y flexibles.

La palabra OLED significa orgánico emisor de luz de diodos, lo que se traduce en una costosa tecnología tanto para el fabricante como para el usuario común, es por ello que ya existen este tipo de televisores en el mercado pero no alcanzan un buen nivel de ventas porque los precios suelen ser bastante elevados.

El material OLED está construido de forma orgánica, basada en el carbono, y los fabricantes han tendido a desarrollar pantallas PMOLED (Passive-Matrix OLED) que son menos costosas pero que tienen limitaciones en cuanto al tamaño físico del televisor y de la resolución que puede lograr, suelen usarse en celulares de gama baja y display de reproductores de MP3. En efecto, los AMOLED (Active-Matrix OLED) son más grandes pero más costosos, y se utilizan en pantallas de smartphones como los de la línea Galaxy.

4/3/2014 - ¿Se puede convertir mi televisor en un Smart TV?

Sí, se puede. Desde hace no más de cuatro años los fabricantes de televisores han traspasado el objetivo de crear pantallas transmisoras para convertirlas en productos capaces de permitir interactividad de un usuario con sus programas preferidos y con otros usuarios. Esto es posible porque los televisores Smart actualmente no sólo se conectan con un cable para recibir energía –necesaria para funcionar- sino que además reciben información y brindan la opción de utilizar aplicaciones, navegar menúes, grabar programas y compartirlos en redes sociales.

En el mercado argentino, el boom de los Smart TV no data de tanto tiempo, pese a que se comenzaron a comercializar poco tiempo después de que los fabricantes los pongan en venta en países como Estados Unidos o Japón, los usuarios locales necesitaron de un empujón para darle crédito a este tipo de tecnologías. Es así como eventos como el Mundial de Futbol que se emitirá en pocos meses convocó a más de un cliente para asegurarse su televisor conectado.

El chiche tiene su costo, por lo que no todos pueden adquirirlo. Sin embargo, quien posea un televisor que admita conexiones HDMI podrá resolverlo de una manera un poco más casera o menos costosa. En principio hay que tener en cuenta que estas opciones pueden no ser adaptadas a todos los modelos. Vamos a los casos:

Si tenemos un televisor un tanto moderno pero que no se considera comercialmente como un Smart TV, sólo verifica si tiene entrada HDMI y conéctalo a algún dispositivo inteligente como un reproductor Blu-Ray, una tableta o un centro multimedia. Las opciones de conectividad las brindará el equipo externo pero las verás en tu pantalla.

Algunas marcas como LG o Sony ofrecen dispositivos preparados para acondicionar tu televisor de la misma compañía al mundo de los Smart TV, siempre y cuando el aparato no contenga esta tecnología, estos dispositivos se anexan muy fácilmente y se adquieren en las tiendas bajo la denominación de “smarty”. Pero si no querés invertir en las funcionalidades inteligentes que te brindan los fabricantes, te podés valer de los streamers de contenido.