Por Flavia Tomaello, https://flaviatomaello.blog/, Instagram @flavia.tomaello
Ahora podés vivir la experiencia que transcurre dentro de la primera casa propia de Maradona ubicada en el barrio La Paternal, de Buenos Aires
Historia y fútbol se fusionan en esta experiencia que recorre la vivienda de Diego Maradona ubicada en la calle Lascano 2257 en el barrio La Paternal de la ciudad de Buenos Aires donde residió con su familia entre 1978 y 1980. La propiedad fue cedida al jugador por Argentinos Juniors con la firma de su primer contrato para que fuera utilizada como hogar familiar para Diego, sus padres y sus 7 hermanos. Próspero Cónsoli, entonces presidente del club de La Paternal, le indicó al joven de 18 años que no le daría una prima con el contrato, sino una casa para la familia.
La propiedad perteneció luego a dos familias y acaba de ser recuperada para ponerla en valor, sin ningún cambio estructural y la reinstalación de la circulación del mismo modo en que estaba planteada en la época en la que la estrella vivió allí.
Aunque abierta de 13 a 19, Civitatis la multinacional de distribución online de visitas guiadas, excursiones y actividades en español, sumó a su plataforma la “Visita a la Casa de Diego Armando Maradona con asado argentino”. La vivencia comienza a las 19 horas en la casa- museo del Diez ubicada a solo unos metros del estadio Diego Armando Maradona de Argentinos Juniors, la cual fue la primera propiedad del astro del fútbol argentino.
Lo primero que se aprecia en su exterior son dos réplicas exactas de los automóviles Fiat 125 y Ford Taunus Coupé, a bordo de los cuales el jugador paseaba por el barrio.
Una vez dentro de la residencia, se recorren las distintas estancias del hogar del astro, entre las que destacan el salón, la cocina y la habitación del futbolista, además del santuario donde los fans de la estrella deportiva depositan donaciones y recuerdos en su honor.
La visita guiada concluye en la terraza, donde se encuentra la parrilla original donde Maradona cocinaba para su familia y seres queridos. En este lugar tan especial se disfruta de una cena que consiste en un sándwich de carne argentina que puede ser bondiola o el tradicional choripán servido con la tradicional salsa criolla.
Impacta la reconstrucción de época y la recuperación de memorabilia propia de Maradona. La concordancia entre la vivencia física y lo que muestran las imágenes que rememoran el paso de la familia allí. Instantáneas que reflejan la mesa familiar, la presencia de los hermanos, el uso central de la cocina y el dormitorio exclusivo dedicado para Diego, además de la terraza con dos murales preparados para la selfie.
Afuera o en las vistas desde la terraza, el barrio sigue inspirando los ´70. Apenas una casa justo enfrente del museo recién abierto muestra señales de aggiornamento. La cercanía del viejo estadio y los murales callejeros acompañan para mantener el espíritu del lugar. Un sitio que, según reza el cartel de la entrada, “el 10” vivió feliz. Sabor a nostalgia y algo de tristeza.