Aprendé a cultivar tus suculentas

Por María Martha Pizzi, Con Sabor a Hogar (www.consaborahogar.com.ar).

Están de moda, en parte porque pueden estar en espacios pequeños, son resistentes y no requieren grandes tareas de mantenimiento. Sin embargo, las suculentas también tienen sus secretos a la hora de tenerlas divinas.

Un primer elemento a tener en cuenta es que estén en un lugar con calorcito. También hay que cuidarlas del agua directa, siempre es bueno que tengan algo de protección, como estar bajo un alero o detrás del vidrio de una ventana luminosa. Su punto débil es pasarse de agua, por eso funcionan tan bien para los ambientes interiores.

Cuando armamos la maceta que las contendrá, hay que hacerlo con un sustrato liviano, que permita un rápido drenaje del agua. Por esto, obviamente, debe tener leca en el fondo. También tiene que ser rico en humus de lombriz, que es un fertilizante natural. La composición debe ser proporcional, una parte de humus y otra de arena gruesa. También se puede usar harina de hueso, ésta ayuda mucho al momento de la floración.

A las suculentas les gustan los contenedores chicos, pues en ellos el agua se evapora más rápido. Por eso, es posible tenerlas en pequeñas macetas que pueden estar decoradas, intervenidas con venecitas o pintadas. También podemos reutilizar objetos como latas de gaseosas o de tés, con esto se le puede dar también un toque de vanguardia a un ambiente.

Por último, estas plantas pueden tener ocasionalmente algunos pulgones o cochinillas. Para los primeros hay que limpiar las hojas con una mezcla de agua y jabón blanco, basta con rociarlas con un vaporizador. Para las segundas, lo ideal es combatirlas con alcohol (pasarlo con un algodón) o ir al vivero y preguntarle por algún producto que contenga Dimetoato, un insecticida organofosforado que, incluso, previene también la aparición de la arañuela roja, que es una especie de ácaro.

¿Cuándo la riego? En primavera y verano basta con hacerlo una vez a la semana, y en los meses fríos conviene a extenderse al doble de tiempo. Para guiarse, hay que ver que la tierra de la superficie esté seca.

Por último, también se puede decorar la suculenta con piedritas de colores para darle una terminación.