Como le gustaría a JR

 

Carnes ahumadas estilo Texas. Envasadas al vacío para disfrutar donde quieras y sentirte como en un capítulo de «Dinastía». Eso es Sams Smoke BBQ.

Si estás acostumbrado a pensar que la barbeque es la barbacoa porque así lo escuchás en los doblajes de las películas norteamericanas, vamos a empezar por decirte que no son sinónimos. En Texas, conviven pero son distintas.
La última se refiere al método de cocción en el que la carne se cuece en su jugo o al vapor y se sirve deshilachada. El método original es mexicano precolombino y consiste en cocinar carnes y verduras en un pozo en el suelo cubierto de piedras calientes. En el sur del continente se lo conoce como curanto y se ha convertido en una especialidad típica chilena.
En cambio, la barbeque, es una de las cuatro variedades regionales reconocidas en EEUU: Texas, Kansas City, Memphis y Carolina. Dentro mismo de Texas hay cuantro variedades, pero la más difundida es la de la región central.  El corte más pedido es el brisket, lo que localmente sería la tapa de asado. Se cocina durante horas a fuego bajo en un smoker (ahumador), apenas untado con salsa barbacoa. Cuando el fuego hizo su camino con caricias, más que con llama, la carne queda casi derretida.

El otro clásico de una barbeque texana son las costillas de cerdo, cerdo desmechado o pulled pork que también se consume en sandwiches y los chorizos (sausages), pollo y pavo. Se suelen comer con una especie de pan lactal de mayor tamaño que el utilizado localmente, pepinillos en vinagre, cebolla cortada, jalapeño y porotos hornedos beans.
Esta práctica era una tradición en las zonas rurales de Texas. Espacios donde la ganadería es casi un arte y la calidad de los productos da lugar a que en el fogón sucedan maravillas.
Si tenés ganas de darte un viaje por Estados Unidos, bien tierra adentro, calzarte el sombrero de JR y degustar un clásico, en Sams Smoke BBQ cocinan como se hace en el sur de los Estados Unidos, con una filosofía low and slow. Todo se cocina a baja temperatura y se elabora ahumando la carne en largos procesos de maceración como se hace en en el lugar de origen. Un bocado es como un vuelo al centro de las carreteras americanas, para hacer una parada, dejar volar el paladar y la imaginación.