Dos herramientas eficaces que aportan múltiples beneficios y ventajas en el área interna y externa de toda empresa, independientemente de su rubro o tamaño.
En un mercado competitivo y en una era cada vez más digitalizada, es fundamental para todas las empresas contar con herramientas que aporten una solución inmediata en tanto organización, planificación y confianza en los procesos de gestión interna, como así también en el aspecto externo. La fidelización con los clientes y las estrategias para alcanzar potenciales, también es prioridad de las empresas y organizaciones.
Las soluciones ERP y CRM son la respuesta a estas necesidades. Si bien es cierto que no necesariamente deben ser implementadas en paralelo, y que una puede funcionar perfectamente sin la otra, la integración entre ambas aporta una excelente y completa gestión con mayores oportunidades y resultados.
Si tomamos como referencia las demandas y consultas de quienes se acercan con sus inquietudes, problemáticas y necesidades, suele ser el ERP la herramienta más elegida por las empresas, y sobre todo la que más priorizan. Y es lógico ya que permite la automatización de los procesos, el cumplimiento con las normativas vigentes, el fácil y rápido acceso a la información, y todo aquello que la empresa requiere para su gestión diaria. Pero es importante también no descuidar el área externa.
La relación con los clientes y con los que vendrán, es tarea del CRM. Unificar todo el proceso de las gestiones comerciales y de cobranzas, realizar un seguimiento detallado del proceso de ventas, administrar bases de datos, realizar campañas de marketing, encontrar oportunidades comerciales y ofrecer un correcto soporte post venta son algunas de las funcionalidades de esta herramienta. Todas ellas destinadas a la planificación de estrategias que darán como resultado una atención rápida y personalizada con los clientes, y a su vez, la posibilidad de convertir acciones en oportunidades de venta.
Como valor agregado esta herramienta también impacta directamente en el área interna de la empresa y entre los usuarios. Tener la posibilidad de sincronizar las acciones e interacciones con cada cliente, que queden reflejadas en este sistema, y que el equipo de trabajo tenga acceso para a estar al día y poder efectuar el seguimiento, son otras de sus posibilidades.
Por su parte el ERP, es la solución estrella a la hora de analizar y mejorar procesos internos, optimizar la gestión diaria, disminuir el margen de error, aumentar la productividad, contar con reportes completos, y con la ventaja de sus actualizaciones fiscales y funcionales permanentes. Al permitir gestionar todas las áreas de una empresa de forma unificada, el ERP es prioridad. En el último tiempo, y en nuestro caso particular, aumentaron notablemente las consultas por la solución ERP, y todas ellas con el mismo factor común en relación a la organización y gestión interna. Pero a la hora de generar oportunidades de ventas, CRM es la solución para aumentar la rentabilidad. Por eso es que la combinación entre ambas es una experiencia garantizada, esta dupla permite cubrir las áreas internas y externas logrando una solución integral, y generando valor de la manera más continúa y completa.
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