Ponerle mucho color

Plantines de cultivo y plantas de jardín para cultivar, aprender, saborear… esp es Humus  una propuesa con mucha tierra y nada de plumeros.

Me divierte arrancar por las etimologías. Las palabras no sólo son un conjunto de letras, también son significado, significante, forma, presencia/ausencia y unos cuantos otros sentidos que se forman en derredor de su definición en función de lo que representan para cada uno de nosotros.

A mi hay palabras que me gustan más que otras. Hay algunas de otros idiomas que encuentro intraducibles porque su carácter y belleza, su precisión didáctica y expresiva, no se logra con el cambio de lengua.
En tren de eso, sin siquiera tener que traducir, una de mis frases chilenas favoritas y que uso como si estuviera del otro lado de la Coordillera, es «ponerle mucho color». Los amigos cuequeros utilizan en término como sinónimo de exagerar. Y nunca me parece más lindo decirlo que de ese modo.
En Humus se inspiraron en el color, precisamente. Y le han puesto mucho, por cierto. Aunque nunca exagerando. La tienda es un proyecto que surgió del entusiasmo.¡De dónde mejor!
 Comenzaron a cultivar hortalizas en casa porque disfrutaban haciéndolo. Pasar tiempo al aire libre, preparar los almácigos, ver crecer los plantines, sorprenderse con flores nunca vistas, las colma de energía.
  Ir de la huerta a la cocina con las verduras recién cosechadas es una experiencia única, sabrosa y saludable. ¡Y no es la única!
Su espacio busca compartir ese entusiasmo, para que todos puedan recuperar su conexión con lo natural, desarrollar la paciencia y el cuidado que requiere cada planta en crecer y madurar, disfrutar la cosecha y el vínculo con la cocina y sus preparaciones.
Ni una agenda apretada ni un espacio pequeño son límites para encontrar este tiempo de disfrute. Proponen acompañarnos en un estilo de vida saludable, sustentable y orgánico. Por ello, no sólo ofrecen plantines orgánicos, si no también aconsejan y diseñan huertas y rincones verdes para espacios urbanos reducidos: se presenta abiertas a las necesidades de cada persona.
Ellas son Carolina, artista visual y socióloga, y Lucía, diseñadora. Comparten su amor por las plantas con una curiosidad inagotable. No es el primer trabajo que comparten. Están a cargo hace 7 años de dar clases en su taller de arte, lo que hace inevitable cierto acento estético en su mirada y propuesta.
«Nos entusiasmamos mutuamente con esta actividad buscando tips, especies, estudiando tareas para desarrollar -cuentan-. Estamos trabajando para ampliar nuestra oferta con más plantas de interior y exterior, contenedores, etc; siempre privilegiando el disfrute, la conexión con lo natural y la nobleza de los materiales».