Shabby chic en los espacios verdes

Por María Martha Pizzi, Con Sabor a Hogar (www.consaborahogar.com.ar).

Es la máxima expresión del romanticismo. También es alegre y delicado, con una gran presencia de pequeñas flores en sus ambientaciones. Así es el estilo Shabby Chic, con una onda vintage ha vuelto a ponerse de moda. Por sus características, es ideal para aplicarlo en los jardines, evocando a los más clásicos de las grandes casas de campo inglesas.

Si queremos tener un jardín Shabby Chic tendremos que poner el acento en tener algunos objetos especiales, pero por sobre todo en cuidar los rosales, en todas sus versiones (trepadores, rococó y más). Los trepadores tienen flores arrepolladas que son muy llamativas, lo mismo sucede con las rosas inglesas o las inglesas. Solamente la presencia de rosas, hace que ese espacio verde se vea especialmente Shabby.

Otras flores que también suman al estilo son los lirios y las flores que den colores blanco, rosado o lila. También las hojas con variaciones de verdes que viren al claro. De esta manera, la naturaleza aporta al diseño.

Para sumar detalles podemos elegir muebles con terminación en decapado y podemos agregar jaulitas. En éstas últimas se pueden agregar pequeños jardines especiales, como uno temático de suculentas con forma de flor. En cuanto a la iluminación, los faroles son clave. Se pueden usar con velas en su interior o colgando con lamparitas eléctricas. Hay que tener cuidado de no recargarlo ya que se pueden sumar muchos elementos. Lo mejor es elegirlos cuidadosamente.

Entre los objetos que son indispensables figuran las regaderas y los contenedores de zinc. En un jardín Shabby Chic hasta las herramientas de jardinería pueden sumar al estilo. Ni que hablar si tenemos un lindo sombrero de ala ancha que usemos con un delantal que puede tener un trabajo de patchwork o una estampa tipo liberty.

En cuanto al mobiliario, los bancos de plaza pintados en tonos pasteles y decapados cumplen con todos los requisitos para estos jardines. Si se cuenta con espacio, se puede sumar una pérgola. Si queremos tener un sillón, lo mejor es que sea de madera o hierro. En cuanto a los textiles, estos deben tener diseños que reflejen a las flores y los pájaros de la naturaleza. Los almohadones son bien recibidos, sobre todo armando conjunto con el resto de las telas de la ambientación.

Por último, si queremos llevar al estilo al máximo, podemos armar un invernáculo para cultivar plantas durante el invierno y hasta tener un espacio destinado a una huerta orgánica.