En una audaz y misteriosa expedición marítima, Ramón Roman, de 56 años, y Gabriel Raimann, de 37, se lanzaron al océano en la madrugada del domingo desde la playa de Cariló a bordo de un kayak naranja equipado con motor. La intrépida travesía, que inicialmente se pensó como una jornada de pesca, ha generado preocupación entre sus familiares, quienes denunciaron su desaparición.
La camioneta modelo Hilux que transportó a ambos aventureros hasta la playa permanece en el lugar de la partida, convirtiéndose en un mudo testigo de la incertidumbre que rodea a esta expedición marítima. Ante la denuncia presentada por un hijo de uno de los desaparecidos, la Policía bonaerense, la Prefectura Naval Argentina y la Secretaría de Seguridad de Pinamar han unido fuerzas para llevar a cabo una exhaustiva búsqueda a lo largo de la costa, desde Villa Gesell hasta San Clemente del Tuyú.
El operativo, que cuenta con la participación de efectivos de los destacamentos de Pinamar, Villa Gesell y La Costa, así como con la colaboración de bomberos y guardavidas, se ha desplegado con una amplia gama de recursos, incluyendo drones, helicópteros y guardacostas. En la tarea de búsqueda se ha sumado el guardacostas Río Lujan, desplazándose desde el puerto de Mar del Plata, junto con un helicóptero que patrulló la zona hasta la caída de la noche.
La magnitud de la operación y la diversidad de recursos empleados reflejan la seriedad con la que se aborda este enigma marítimo. La UFI N° 8 de General Madariaga, bajo la dirección del doctor Walter Mercuri, ha asumido la responsabilidad de investigar este caso que, por ahora, se mantiene rodeado de incertidumbre y ansiedad, esperando encontrar respuestas en las olas que se llevaron a estos dos hombres.
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