"Nací en una villa cerca de Avellaneda y eran muy pocas las posibilidades de ser futbolista. Lo veía muy lejos. Todo lo que veía normal eran armas, drogas y un montón de cosas que uno ve o escucha y debe callar. Perdí a mi papá muy joven y mi mamá se hizo cargo de tres hijos".
"Hoy no vuelvo a mi barrio porque ya no se puede. Pasas a ser un signo pesos para mucha gente. Me dolió en su momento. Hay mucha envidia de gente que por ahí no puede salir de ahí y le agarra esa cuota de envidia".
"Vos te mezclás con las personas de la villa y no tenés relación con otra gente. Sos discriminado y nadie apuesta a las condiciones que tenés".
"Me gustan las armas. Me jugó muy en contra. La primera foto que me saqué con un arma fue antes de ser profesional. Cuando fui profesional empezó a circular la foto. Después la otra foto que estaba en la casa de un amigo con una ithaca doble caño, me saqué la foto y no me acuerdo a quién se la mandé. Otra vez me mataron. Me gustan las armas. Si me criaba con un yate, me sacaba fotos con un yate. Jamás cometí un delitoporque sabía que después llegaba a mi casa y cobraba".
"Cuando debuté en primera, que me llegó todo junto, agarré marihuana. Hoy en día tenés controles antidoping que te puede caer sorpresa, quizás te cae en la semana y si lo hiciste es una mancha que no te la sacás más. Antes era uno por semana y te podías mandar un blooper".
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