Un episodio tan doloroso como perturbador ocurrió en la ciudad de Mar del Plata, específicamente en el Bingo Puerto, ubicado sobre la avenida Edison al 400. Allí, una mujer de 71 años falleció repentinamente dentro del salón de juegos, presuntamente por causas naturales.
Empleados del lugar cubrieron el cuerpo con una sábana blanca mientras aguardaban la llegada del servicio médico, que luego confirmó el deceso. Sin embargo, lo que más sorprendió e indignó no fue la muerte en sí, sino la reacción del entorno.
A pesar de la dramática situación, los presentes siguieron jugando frente a las tragamonedas como si nada hubiera ocurrido. La escena generó quejas aisladas entre algunos clientes, pero el ambiente continuó casi con normalidad hasta que el cuerpo fue retirado.
Este episodio deja al descubierto una falta alarmante de empatía, donde la búsqueda de entretenimiento parece haberse impuesto al respeto por la vida y el dolor ajeno. La indiferencia colectiva frente a una muerte en un espacio público interpela profundamente a la sociedad.
Las autoridades señalaron que, al tratarse de un fallecimiento por causas naturales, no se abrió una investigación judicial.
Foto: InfoBAE
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