En una entrevista reciente, Lilia Lemoine, candidata a diputada por La Libertad Avanza (LLA) y asesora del candidato presidencial Javier Milei, ha desatado una polémica al anunciar su intención de presentar un proyecto de "renuncia a la paternidad" en el Congreso, una propuesta que carece de fundamentos sólidos y ha generado una amplia crítica.
Lemoine argumenta que no es justo que un hombre deba hacerse cargo económicamente de un hijo hasta los 18 años si no deseaba tenerlo en primer lugar. Su argumentación se basa en lo que ella llama "mitos urbanos", como los preservativos rotos o "pinchados" intencionalmente por las mujeres, un razonamiento que ha sido ampliamente desacreditado y que desestima la realidad de muchas mujeres que enfrentan situaciones de violencia de género.
El planteamiento de Lemoine se enmarca en su rechazo a la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), lo que revela una conexión entre su postura sobre el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo y su propuesta de "renuncia a la paternidad". En sus palabras, "ya que las mujeres tienen el privilegio de matar a sus hijos y renunciar a ser madres, ¿por qué los hombres por ley tienen que mantener a una criatura porque quizás le dijeron 'tomo la pastilla' o le pinchan un forro?", una declaración que ha sido criticada por su peligroso criterio.
Según el proyecto de Lemoine, una mujer embarazada tendría 15 días para notificar al padre, quien posteriormente podría decidir si se hará cargo del hijo o no. Esta propuesta plantea serias preocupaciones sobre el bienestar de los niños y la igualdad de género, ya que no considera adecuadamente las responsabilidades parentales y no aborda las complejidades de las relaciones humanas y las decisiones compartidas.
La iniciativa de Lilia Lemoine ha suscitado un debate intenso y ha llevado a una discusión más amplia sobre los derechos reproductivos y la igualdad de género en la sociedad actual.
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