La tragedia que enlutó al Festival Aéreo de Bell Ville ya tiene nombre y apellido. Las autoridades confirmaron que las víctimas fatales fueron Mariano Latuf Zeballos, oriundo de Villa Cañás (Santa Fe), y Ricardo Ferrer, nacido en Alpachiri (La Pampa) pero residente en Ascensión (Buenos Aires).
Latuf Zeballos, además de su pasión por volar, trabajaba como DJ en fiestas y eventos de la región. Ferrer, por su parte, era un piloto experimentado y muy querido en su comunidad.
El accidente ocurrió el sábado por la tarde, cuando la aeronave sufrió una pérdida de sustentación al despegar, impactó contra la pista del Aeroclub de Bell Ville y se incendió de inmediato. En el lugar trabajaron bomberos, personal policial y el fiscal Nicolás Gambini, quien encabezó las primeras diligencias judiciales hasta la llegada de la fiscal federal Virginia Miguel Carmona y técnicos de la Junta de Seguridad en el Transporte (JST), que investigan las causas del siniestro.
La comunidad aeronáutica expresó su pesar y las actividades del festival fueron suspendidas en señal de duelo.
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