Desde la inauguración de la Autopista, la calle Miguel Cané ha adquirido un papel fundamental como uno de los principales accesos a la ciudad de Pergamino. La primera etapa de esta obra, con un presupuesto oficial de $415.227.400, se ejecutará a lo largo de 1.300 metros lineales, desde la bajada de la Autopista hasta el cruce con la Ruta Nacional 8.
La intervención incluirá la creación de una calzada de 7 metros de ancho, con un asfalto desplegado en dos capas y un espesor que oscilará entre 7 y 8 centímetros. Los trabajos abarcarán la demolición del pavimento existente, la recomposición de la base a lo largo de los 1.300 metros, la corrección de los canales de desagües, el reemplazo de los alcantarillados con tubos de 800 de diámetro, la reparación del puente existente y, finalmente, la aplicación de un nuevo pavimento asfáltico.
Desde la Secretaría de Desarrollo Urbano, se destaca que la segunda etapa del proyecto se centrará en la señalización horizontal para una circulación segura, mejoras en la iluminación para incrementar la seguridad vial, así como trabajos de forestación y parquización que aportarán un carácter estético y ambientalmente amigable a la arteria recién pavimentada.
La apertura de sobres para la licitación de la obra está programada para el día 15 de febrero a las 10 horas, marcando el inicio de una nueva fase en la evolución urbanística de Pergamino. Con esta transformación, se espera no solo optimizar la movilidad de los residentes locales, sino también brindar una cálida bienvenida a todos aquellos que visiten este pintoresco rincón de la región.
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