06/07/2009 - "Los edificios estarán abiertos, pero no habrá funciones. Y se devolverá el dinero de las localidades ya compradas", explicó el presidente de la Asociación Argentina de Empresarios Teatrales (Aadet), Carlos Rottemberg, al anunciar la medida que rige desde este lunes.
Los teatros estatales de Buenos Aires se plegaron a la iniciativa, indicó hoy el ministro de Cultura porteño, Hernán Lombardi, quien sostuvo que "las autoridades no pidieron esta medida, pero se ha roto el clima que se necesita en un espectáculo teatral por la presión social que existe" a causa de la enfermedad.
Rottemberg admitió en una rueda de prensa que en los últimos días hubo "un 80 por ciento de espectadores menos en los teatros" a raíz del fuerte avance de la gripe A, que derivó en la suspensión de todo tipo de actividades oficiales, culturales, educativas y deportivas.
"Es una medida muy a pesar nuestro, pero que consensuamos en la asociación", señaló el empresario de espectáculos Daniel Grinbank, durante la rueda de prensa brindada en la sede de la entidad, en Buenos Aires.
La gripe A "impacta drásticamente en el quehacer teatral" y, con esta medida, que se extiende a todo el territorio nacional, se busca "salvaguardar la actividad" y evitar la "paranoia" de los espectadores, añadió Rottemberg.
Al menos una veintena de distritos de la provincia de Buenos Aires, la mayor del país, canceló sus actividades y ordenó el cierre de bares, salones bailables, natatorios, gimnasios, bingos, cines, teatros y museos para combatir la propagación del virus AH1N1.
El ministro argentino de Salud, Juan Manzur, inició hoy una reunión con sus pares provinciales para analizar la situación en cada una de las regiones, evaluar "el diagnóstico de situación exacto y tener un informe técnico pormenorizado de la curva epidemiológica" de la enfermedad.
El ministro asumió el cargo el miércoles después de la renuncia de Graciela Ocaña el pasado lunes, un día después de la derrota del oficialismo en las elecciones legislativas y en medio del rápido avance de la gripe A. EFE