28/01/2008 - Olmedo y Lanús, emparejados en la llave A de la fase preliminar de la Copa Libertadores, pugnan por la plaza que resta en el Grupo 2 de la segunda fase del torneo en el que ya están emparejados otro argentino, Estudiantes de La Plata, un ecuatoriano más, Deportivo Cuenca y los uruguayos del Danubio.
El decisivo partido de vuelta se disputará el 5 de febrero en la cancha del Lanús, que el 2 de diciembre pasado alcanzó por primera vez un título nacional en su país.
El entrenador colombiano Armando Osma ha fijado así la prioridad del equipo de Riobamba: "ganar o ganar a Lanús".
"Esa es mi única visión en este momento: ganar ese partido que nos daría la posibilidad de estar más cerca, añadió el ex futbolista, quien fue asistente de Luis Fernando Suárez en la selección ecuatoriana.
"Este es el desafío más grande", dijo al describir su primera gran experiencia sólo desde el banco de un equipo ecuatoriano.
El conjunto 'granate', que dirige Ramón Cabrero, mantendrá en la plantilla titular a la mayoría de los jugadores que triunfaron en la liga argentina, en su mayoría procedentes de las canteras de la entidad bonaerense.
Walter Ribonetto y Diego Manicero serán los grandes ausentes.
Ribonetto fichó por el Rosario Central y Manicero por el Racing Club. Por otra parte, el brasileño Jadson Viera deberá esperar unos días más para volver a las canchas mientras se recupera de una lesión en el tendón de Aquiles.
Los jugadores afinaron en los últimos días su rendimiento físico y futbolístico en el estadio de Lanús, mientras Cabrero combinó los entrenamientos con el análisis de varios vídeos que permitieron estudiar al rival.
"Tenemos que ir a la altura y ningún equipo es fácil ahí. No hay que olvidarse que será nuestra primera Libertadores", señaló.
Osma también encarará los dos partidos de la fase inicial de la Libertadores como laboratorio para saber qué peso tienen sus hombres con vistas a la Liga ecuatoriana, que comenzará el 10 de febrero.
El colombiano había expresado sus deseos de dirigir la selección ecuatoriana tras la renuncia de Suárez en noviembre luego de una decepcionante presentación del plantel en la Copa América y las primeras tres jornadas de las eliminatorias del Mundial.
Ramón Cabrero considera que su equipo tiene "otra confianza" para afrontar un torneo internacional, porque si logró un campeonato local puede jugarle "de igual a igual" a brasileños y mexicanos.
Aclaró que los intereses en ambas competiciones, la Libertadores y la Liga local, son complejos para una plantilla tan reducida. "Ojalá lleguemos a una instancia en la que podamos privilegiar a la Copa por sobre el Clausura", puntualizó. EFE