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BolÃvar hace historia: Del sueño al cielo del fútbol argentino
El Club Ciudad de BolÃvar logró el ascenso a la Primera Nacional tras vencer por penales a Atlético de Rafaela en una final inolvidable disputada en San Nicolás. Un logro épico para una institución joven que transformó la ilusión de un pueblo entero en hazaña deportiva.
Hace 3 horas.
El 19 de octubre de 2025 quedará grabado para siempre en la memoria de Bolívar. En una noche cargada de tensión y emoción en el Estadio Único de San Nicolás, el Club Ciudad de Bolívar derrotó a Atlético de Rafaela en los penales y conquistó su primer ascenso a la Primera Nacional, escribiendo así la página más gloriosa de su corta historia.
El encuentro fue un fiel reflejo de las finales: cerrado, táctico y de alto voltaje emocional. Rafaela intentó imponer su jerarquía, pero Bolívar resistió con orden y paciencia. Los bonaerenses, conducidos por Diego Funes, apostaron al juego asociado y a la solidez colectiva, en un partido que terminó 0 a 0 y se definió desde los doce pasos.
Antes de la tanda, el técnico tomó una decisión clave: Enzo Álvarez ingresó por el arquero titular para la definición. La apuesta resultó perfecta. La serie de penales tuvo de todo —errores, suspenso y redención—, hasta que Jonatan Maciel marcó el gol decisivo y Facundo Affranchino erró el último disparo de Rafaela. Bolívar 5, Rafaela 4.
Con ese desenlace, Bolívar se consagró campeón del Torneo Federal A 2025 y logró el ascenso más importante de su historia. Para un club fundado en 2002 y que hace apenas cuatro años jugaba su primera temporada en el Federal A, el salto al fútbol grande representa mucho más que un triunfo: es la coronación de un sueño colectivo.
En la ciudad, la alegría fue desbordante. Calles repletas, bocinas, banderas y abrazos dieron forma a una celebración que unió generaciones. El equipo que nació desde la pasión y la perseverancia hoy se ganó un lugar en el mapa mayor del fútbol argentino.
“Bolívar tocó el cielo con los pies”, resumió un hincha entre lágrimas, mientras el pueblo entero vivía una noche eterna.
Foto: Diario la Mañana