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Colapinto, sin filtros tras el GP de HungrÃa: «Fue un desastre, una carrera para el olvido»
El piloto argentino Franco Colapinto no ocultó su decepción por el rendimiento del Alpine A525 en Hungaroring. Dos paradas lentÃsimas en boxes y una estrategia errática marcaron un fin de semana frustrante para el joven de Pilar, que ya piensa en revertir la situación tras el receso.
Hace 5 horas.
La frustración se escuchó por radio y luego se confirmó en la rueda de prensa. “Una carrera para el olvido”, dijo sin rodeos Franco Colapinto luego del Gran Premio de Hungría, donde finalizó 18° tras un cúmulo de errores que arruinaron cualquier posibilidad de sumar puntos con su Alpine A525. Su compañero Pierre Gasly terminó 19°, completando un fin de semana para el archivo.
El argentino de 22 años ya había tenido un inicio complicado en la largada, donde sufrió la falta de grip y perdió posiciones. El equipo apostó entonces por una estrategia de dos paradas, pero fue allí donde todo se desmoronó. La primera detención en la vuelta 15 duró más de siete segundos por problemas en el neumático trasero izquierdo, una eternidad en la Fórmula 1. “¡Mi dios! Oh…”, exclamó el pilarense por radio, en un lamento que resumía todo.
Aunque Colapinto logró recuperar ritmo y defenderse incluso del Mercedes de Antonelli, la segunda parada fue aún peor: 7,2 segundos para cambiar las ruedas. La bronca fue inmediata: “¡La puta madre!”, gritó al salir último nuevamente, justo cuando su ingeniero le advertía que se venía el Mercedes de George Russell.
Pese a los intentos por recuperarse, el daño estaba hecho. El joven argentino no sólo perdió ritmo con las detenciones, sino también con las banderas azules que lo obligaron a ceder paso y perder aún más tiempo. “Paramos muy temprano. Perdimos mucho tiempo en boxes y después con los rezagados. Fue un desastre”, resumió tras la bandera a cuadros.
Colapinto, sin embargo, dejó entrever algo de optimismo en sus declaraciones finales. A pesar del mal trago, valoró que empieza a sentir una mejora en el manejo del auto: “Estoy teniendo un mejor sabor con el auto”, dijo, y tuvo un gesto amable con su ingeniero: “Gracias por el esfuerzo, que tengas un lindo casamiento”.
La próxima cita será tras el parate veraniego en Zandvoort, del 31 de agosto al 1 de septiembre. Aunque no se esperan mejoras técnicas en el monoplaza, el piloto argentino promete seguir trabajando para revertir la situación.