Policiales | Asesinato
Intendente de San Luis: antes del crimen de mi esposa fui amenazado
La jueza que investiga el asesinato de Romina Aguilar, esposa de Diego Hernán Lorenzettl, dijo que el intendente de la calera declaró que "veinte dÃas" recibió "amenazas graves" pero que no habÃa radicado la denuncia.
02-02-2016
La magistrada Virginia Palacios consideró que los dichos del jefe comunal Diego Hernán Lorenzetti (38) "serÃa la punta del ovillo" para iniciar la investigación en torno a la posibilidad de que el homicidio de su esposa Romina Celeste Aguilar (32) "responderÃa" a la labor de él, quien hace dos años ganó las elecciones internas justicialistas por sólo dos votos y habÃa cruzado agresiones verbales y denuncias con sus antecesores en el cargo.
"El señor (por el intendente) dice que habÃa recibido amenazas pero no lo tenemos constatado de manera fehaciente. (Declaró) que las amenazas habÃan tenido que ver con su actividad polÃtica. Pero son dichos de él, no es una cuestión que ha sido corroborada", dijo esta tarde a TN la jueza.
Consultada sobre el contenido de esas supuestas amenazas, la magistrada indicó que fueron "amenazas graves", al tiempo que aclaró: "Se le preguntó (a Lorenzetti) si en algún momento radicó la denuncia y tengo entendido que no lo radicó".
"El abogado del señor me comunicó hoy que habÃa recibido una amenaza hace veinte dÃas y que eran de un número (telefónico) privado, de una voz de sexo masculino, y por un breve perÃodo de tiempo", precisó la jueza.
Según Palacios, en esta etapa de la pesquisa "se está tomando declaración testimonial a todo el cÃrculo tanto del señor intendente como el de la vÃctima" y que ya declararon, por ejemplo, una hermana y la mejor amiga de Aguilar, además del propio Lorenzetti.
"De hecho, a partir de las declaraciones de él, en cuanto a que (el crimen) responderÃa a la actividad polÃtica que lleva a cabo, serÃa la punta del ovillo para iniciar la investigación", precisó.
Respecto a lo declarado por personas que no forman parte de ese "cÃrculo" del matrimonio, la magistrada recordó que "existe una testigo que pudo ver algo, no con demasiada claridad" y que las testimoniales las "está tomando la PolicÃa".
"Se está trabajando de manera ardua, con la colaboración de todas las divisiones y dependencias correspondientes (…) Se trabajó muchÃsimo en el lugar del hecho, en el cuerpo de la vÃctima, también en su domicilio y se está trabajando en todo lo que es telefonÃa e informática", sostuvo.
En ese sentido, la jueza opinó que "el tema de las comunicaciones puede ser determinante, o muy importante para abonar alguna de las hipótesis en las que se está trabajando".
Sin embargo, Palacios se excusó de detallar cuáles son las hipótesis para no afectar el avance de la investigación: "SerÃa irresponsable decir 'la hipótesis es ésta' y descartar otra", evaluò.
Por último, la jueza añadió que en la escena del crimen se secuestró "un proyectil" y que a partir de la autopsia "no se advirtió la existencia de resistencia" por parte de la vÃctima" y "que fueron dos disparos" cuando "en un principio se pensó que podÃan ser cuatro pero no fue asÃ".
Por su parte, el jefe de Relaciones Policiales de San Luis, comisario inspector Carlos Pereyra, precisó hoy que en la pesquisa interviene personal de las divisiones Homicidios, Delitos y CriminalÃstica de la fuerza local.
El crimen de Aguilar fue cometido alrededor de las 6.40 del sábado pasado, en la puerta de la casa 1 de la manzana 78 del barrio FAECAP, en el norte de la ciudad de San Luis, donde la mujer residÃa junto a su esposo e hijos.
En momentos en que la mujer acababa de sacar su camioneta Renault Duster negra para viajar a La Calera, donde cursaba el final de la escuela secundaria a través del programa Plan de Inclusión Educativo (PIE), fue sorprendida por dos jóvenes armados que iban en moto.
Los agresores la tomaron de la ropa, la arrastraron unos diez metros por el suelo, le dispararon dos balazos calibre .45, y escaparon en el mismo rodado en el que llegaron y sin robar nada.
Sobre el posible móvil del crimen, los pesquisas analizan si un reciente embarazo detectado en la autopsia pudo haber tenido algún tipo de vinculación con el hecho, o si el ataque pudo provenir de enemigos del ámbito comercial o polÃtico de Lorenzetti, quien es oriundo de la provincia de Santa Fe, y llegó hace unos pocos años a San Luis.
Lorenzetti ganó en las elecciones por la intendencia de La Calera de 2014, luego de haberse impuesto por sólo dos votos en la interna del PJ y desplazó del lugar a los hermanos Leyes, quienes desde hace muchos años se alternaban el mando en esa comuna, y con quienes habÃa mantenido algunas agresiones verbales y denuncias cruzadas en la campaña.
Lorenzetti es un apasionado por las carreras de caballos, y una versión indica que en ese ámbito debÃa dinero a un grupo de personas, quienes ya habrÃan ido a reclamarle al edificio municipal, pero éste se habrÃa negado o no habrÃa podido efectuar el pago.
"Me mandaron a matar a mi mujer, cómo le explico a mis hijos", expresó entre lágrimas el propio jefe comunal a un medio de comunicación local, poco después del crimen.