La Iglesia Católica rompe su vínculo con Leda y suspende la misa en sus encuentros

La relación entre la Iglesia Católica y la figura de Leda, líder del grupo Soplo de Dios, ha llegado a un punto de quiebre tras una serie de controversias que culminaron en la ruptura definitiva entre ambas partes. Tal como había anticipado Cadena 3 Rosario, las tensiones habían alcanzado su punto máximo debido a la práctica de la imposición de manos que Leda incluía en sus encuentros, un ritual que había sido criticado por el Arzobispado.

En un comunicado oficial, el Arzobispado de Rosario anunció la suspensión de cualquier actividad pastoral vinculada a Leda y su grupo. Esta decisión marca el fin de un camino conjunto que hasta ahora mantenían, limitando la actividad de la agrupación a su "exclusiva responsabilidad". Como consecuencia, se confirmó la cancelación del próximo encuentro previsto para el 15 de octubre, dejando en claro que los eventos de Leda ya no contarán con el respaldo de la Iglesia.

Uno de los principales motivos de esta ruptura ha sido la controversia en torno a la imposición de manos, un ritual que Leda realizaba durante sus eventos y que, según la Iglesia, no respetaba los acuerdos previos de prudencia y transparencia que ambas partes habían establecido. Esta práctica, central en las actividades de Soplo de Dios, fue señalada como un punto de fricción insalvable.

El Arzobispado de Rosario, en su comunicado, destacó que la medida fue tomada de forma prudencial, en respuesta a las crecientes diferencias y controversias que rodean a la líder espiritual. La Iglesia reiteró que la decisión busca preservar la integridad de sus prácticas y su relación con la comunidad, alejándose de actividades que considera ajenas a su doctrina.

Este desenlace confirma lo que ya era un deterioro evidente en la relación entre Leda y la Iglesia Católica, un vínculo que parecía insostenible ante las recientes desavenencias y la falta de cumplimiento de los acuerdos iniciales.