Coco Ramuno ratifica su condición de aeromodelista
Tras su actuación como piloto de autogiro en el Festival de General Rodríguez y luego de sus declaraciones ante un conocido programa de TV donde manifestó ser "ex-aeromodelista", Coquito Ramuno volvió al campito de vuelo ratificando su condición de aeromodelista. "La verdad que lo de la nota televisiva fue un exabrupto", aclaró Coco a la plana mayor liderada por Nestor Castells.
Coco junto a su modelo Fenix de fabricación propia
Se lo vió muy activo en la tarde de hoy:
- No tenés una batería para el transmisor?
... a los 2 minutos...
- Tenés un destornillador para la baja?
... a los 2 minutos...
- Tenés arrancador?
... a los 2 minutos...
- Tenés una pila para la bujía?
... a los 2 minutos...
- Tenés un poco de combustible?
...Finalmente hizo dos vuelos y demostró que entre el ayer y hoy casi no hay diferencias...

Un sábado con emoción
Llegué al aero club y dado el viento reinante, no apto para hacer aeromodelismo, decidí ir a charlar con los pilotos en el hangar del negro País. Luego de saludar y charlar un par de minutos, el negro miró su avión RV y me dijo “Vamos a dar una vuelta”. “Vamos”, le dije. De atrás se escuchó a Pablo Barrios preguntar ¿Con emoción o sin emoción?... ”Con emoción”, contestó firme y decididamente el negro.
El avión RV de Eduardo "Negro" País
Para los que no saben, para el negro, volar "con emoción" implica someter al acompañante de vuelo a maniobras acrobáticas. Esta vez, con humo y todo. Completito!
Una vez en la cabecera de la pista, le dio motor y tomamos altura. Pasamos los 300 metros y las turbulencias dejaron de sentirse. Me costaba ubicarme geográficamente, pero a medida que evolucionaba el vuelo me fue más fácil. Siempre adelantándose a las maniobras, por el intercomunicador, me iba explicando cómo las llevaría a cabo.
Hizo dos looping, un ocho cubano, dos toneles y un invertido. Lo más emocionante fue el looping, que al hacerlo, tirás la cabeza hacia atrás y vas viendo la tierra como se da vuelta. Impresionante!. Tengo que ser sincero que hubo un momento en el que pensé dos cosas. Fue en el vuelo invertido. Primero pensé en la persona que me había atado el cinturón, si lo habría hecho bien. Y luego, si se desprendía el cinturón, en el apuro que me iba dar para agarrarme de “no se qué” para no caerme. Realmente te sentís colgado cabeza abajo.
Cabina del RV
En un momento escucho por el intercomunicador, “…bueno, ahora lo tenés vos. Pilotealo. Es todo tuyo.” Me hizo hacer unos ejercicios de coordinación moviendo alerones y timón en forma simultánea y virar hacia un lado y otro. Luego me hizo hacer el circuito previo al aterrizaje. “Ves donde esta la pista…ahora hace la inicial, básica y final”. Una vez que estaba para aterrizarlo, puso flap y tomó los mandos nuevamente el negro. “No saques las manos del bastón, seguí los movimientos para sentir como hago la maniobra de aterrizaje", me dijo. Tocamos el suelo de una manera impecable. Hoy seguramente voy a soñar con esto. He piloteado un avion real por primera vez "con emoción".
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