El juicio político contra el   suspendido Jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, entró hoy en   su octava jornada de audiencias con los testimonios del actual   Secretario de Seguridad de la ciudad, Diego Gorgal, y su   antecesor en el cargo el diputado Juan José   Alvarez. Ambos dieron precisiones sobre cómo se   encontraba el área de control luego de la tragedia de   Cromañón. 
       Al ser interrogado por   la Sala Juzgadora, el diputado duhaldista Juan José Alvarez   aseguró que antes de que se produjera la tragedia de Cromañón   "había gente valiosa y   mecanismos adecuados" de control, y consideró   que, a pesar de la existencia de esa estructura "correcta" de   control, "no   alcanzó". 
      Aunque reconoció que al   momento de asumir, 8 días después de la Tragedia,   la Secretaría se   “encontraba en una enorme crisis”, Alvarez aclaró   que "no es que no   existía nada" en esa dependencia comunal: "Sobre   la estructura que había, teníamos que redireccionarla en función   de la situación concreta y lo que son mis criterios objetivos con   los cuales gestiono". 
      Según Alvarez, con la "misma   normativa" que había cuando llegó al cargo se pudo "clausurar 500   locales" porteños. Y agregó que "el poder de policía yo no lo   interpretaba, lo aplicaba". 
      El diputado precisó que las   clausuras que se hicieron en los primeros días de su gestión   “para algunos era casi   como un show, pero para nosotros era recuperar la capacidad de   fiscalizar y actuar en contra de los que lucraban   con actividades que generan riegos". 
      Antes del testimonio de   Juanjo   Alvarez, que comenzó a declarar pasadas las 13, fue   el turno de su sucesor en el cargo, Diego Gorgal quien sostuvo   ante la Sala Juzgadora que durante el año pasado se   inspeccionaron 50 mil locales porteños a diferencia de lo   totalizado en 2004, que se ubica entre 16 y 17 mil   controles. 
      El funcionario también   precisó que la dirección que cuenta con 210 inspectores, treinta   más que en 2004, recibió el año pasado -como consecuencia del   incendio del boliche Cromañón- un presupuesto extra de veinte   millones de pesos para incrementar las tareas de supervisión de   los comercios. 
      Gorgal asumió en abril de   2005 en reemplazo de Alvarez , cuyo nombramiento luego de la   tragedia de Cromañón fue el signo más claro de que entonces el   Gobierno nacional estaba decidido a sostener a Ibarra: el   presidente Néstor Kirchner y Eduardo Duhalde fueron quienes   acordaron el nombre de Alvarez. El ex secretario renunció, tal   cuál se había pactado, cuatro meses después.