Eliminar el sufrimiento como objetivo del yoga

Por Gabriela Binello autora de Yoga Personalizado (www.yogapersonalizado.com/).

Entender por qué sufrimos, para qué sufrimos, y si se puede resolver el sufrimiento es el objetivo principal de las escuelas filosóficas que se forman alrededor del Yoga. Las reflexiones que esas escuelas alcanzan, nos permiten comprender los distintos aspectos del sufrimiento y sus reflexiones nos alcanzan hasta estos días.

Uno de estos aspectos se apoya en la premisa de que el sufrimiento se remueve si perfeccionamos nuestros hábitos mundanos y espirituales. Así, al trabajar sobre nuestras acciones podremos acceder a lo divino. Encontrar el orígen del sufrimiento, entendiendo que responde a una lógica de causa- consecuencia, es otra de las maneras de desprenderse de él.

Para algunas escuelas,  es el camino espiritual del hinduismo el único capaz de resolver el sufrimento pero para otras  el origen de nuestro sufrimiento es la identificación total de la conciencia, infinita e imperturbable, con la materia, finita y cambiante. La conciencia necesita de la materia para experimentar el mundo pero, en esa unión, “no puede reconocer” su capacidad ilimitada y queda “presa” del mundo fenoménico. Recordemos que toda la manifestación co- nocida (liṅga) está impregnada, en última instancia, de la combinación de puruṣa y prakṛti. Nuestro intelecto, nuestros pensamientos, nuestros sueños, pertenecen al campo de la materia desde este modelo evolutivo.
La propuesta del yoga es comprender los niveles, actividades, tipos de nuestra mente para que podamos “des-identificarnos” con la materia (aunque nunca de manera permanente mientras estemos vivos) y así reconocer nuestra ilimitada potencialidad proveniente de puruṣa (estable, infinita, que no muere, no decae). En la medida que accedemos a los planos más sutiles y profundos de nuestra mente, más nos acercamos a la ilimitada potencialidad de puruṣa y más nos alejamos del sufrimiento (que no es otra cosa que la identificación con la materia).