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Encontrar sentido

Por Flavia Tomaello, https://flaviatomaello.blog/, Instagram @flavia.tomaello

La pandemia nos ha dejado reflexiones. No sólo en términos de prioridades, sino de consumo. La mentalidad cooperativa transforma las economías regionales y permite un vínculo renovado cliente/productor. Esa es la propuesta que tiene la CAP.

No es cuestión de juntarse. El mito colaborativo no se hace sólo de voluntades. Es similar a las ideas: tenerlas no es lo valioso, de comcretarlas se trata. La Cooperativa de trabajo apícola Pampero (CAP) apostó a eso: un encuentro productivo con responsabilidad para con el producto, los integrantes y el mercado.
Se formó en el año 2012 a partir del trabajo asociativo y multidisciplinario de distintos sujetos intervinientes en la apicultura regional. Su objetivo ha sido lograr la autosustentabilidad de la apicultura a través de la democratización de los medios de producción.
Se abocan al desarrollo del mercado apícola, con particular interés en la investigación y desarrollo de productos que favorzcan la producción y a los productores. Brindan asesoramiento técnico gratuito amás de 160 productores de la región del sudoeste bonaerense, quienes integran la entidad.
En materia de investigació realizan búsqueda y análisis de bibliografía, desarollo de estudio y ensayos, publicaciones científico/técnicas y organización de capacitaciones, además de la puesta a punto de desarrollo de producto y mercado.
Tienen como meta la intervención activa y positiva en su sector, desarrollando protocolos de certificación de procesos productivos; organización y seguimiento de sistemas de registros trazables; control de calidad, audtorías, habilitaciones y eventos. Toman injerencia en el proceso de industrialización y consignación.
Han diseñado un esquema de participación que implica el compromso activo de todos los integrantes, quienes desarrollan todo tipo de tareas dentro de la entidad como parte de su integración a la CAP, además de distribuir los ingresos en función a las horas dedicadas el proyecto.

Sabor en equipo

Las mieles Pampero provienen de la region sudoeste del país. Al CAP trabajar en toda la cadena de produccion es posible que el productor reciba un precio justo, además de brindarle servicios e insumos a bajo costo. Sus mles son cremadas en frío obteniendo producto facil de untar, sin perder sus propiedades; además de ser tipigficadas según su origen floral.
Su versión Praderas Secas está compuesta por néctar de especies de la región semiárida pampeana, como flor amarilla y abrepuño. Presenta un color claro con tonalidades verdosas. Tiene un aroma suave, cálido y floral frutado con dejos amaderados y un sabor suave, algo picante.
Monte nativo, en tanto, posee néxtar de las especialidades del Monte Pampeano como piquillín, caldén, alpataco y jarilla. Presenta un color ámbar oscuro. Tiene un aroma y sabor intenso y cálido con notas especiaddas.
Los girasoles, tréboles, alfalfa y cardos son las especies cuyos néctares se suben a la versión Praderas Húmedas, de color ámbar, con tintes anaranjados, de aroma floral, cálido sutil y sabor intenso.
Cardón Serrano está compuesto por néctar de especies típicas de las sierras del sistema de la Ventanía, como brusquillas, flor moradda y senecios. Presenta color ámbar claro. Tiene aroma y sabor intermedio a intenso con notas florales y frutadas.
La miel es un producto que ha utilizado el ser humano desde sus orígenes. De hecho, las pinturas rupestres de la Cueva de la Araña, en Bicorp (Valencia), que datan de 7.000 años antes de Cristo, muestran como un hombre está recolectando miel. Esto demuestra que ya los primeros pobladores de la tierra descubrieron los beneficios de este alimento, se unieron para reunirlo y lo distribuyeron en sus comunidades. Volviendo a los orígenes y proyectando lo que viene, CAP sostiene los principios esenciales que el mundo de la gastronomía venía anunciando y que, sin dudas, se convertirán en marca: KM0, sustentabilidad, cooperativismo, mercados sostenibles, precio justo. Que así sea.