Por Luz marina Lucero, Técnica en Floricultura y Jardinería UBA de AJEU, Amigos del Jardín y la Ecología Urbana, www.facebook.com/amigosdeljardinylaecologiaurbana/
Casi siempre el invierno nos suele sugerir que el entorno se vuelve algo frío, descolorido, un poco triste; sin embargo todo lo contrario!!!! Es una de las estaciones del año más coloridas y que además nos ofrece muchas tareas por realizar, así que el frío no se deja sentir, puesto que la temperatura algo menor trabajar más tiempo en el jardín sin agotarnos.
Para organizarse hay que dar una mirada al jardín. Numerosas plantas pasan por su mejor momento, pero el arduo periodo vegetativo de meses anteriores se deja notar en casi todas las especies, y si no pone usted algo de su parte y las estimula a base de ciertos cuidados no saldrán airosas de este trance. No se trata de trabajos que nos exijan grandes esfuerzos, simplemente, riegue, abone y elimine puntas marchitas para que produzcan nuevas hojas y flores
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A los arbustos aplíquele un abono moderado que se puede incorporar con un fertilizante foliar balanceado, a mitad de dosis recomendada y en total tres aplicaciones que se harán una cada diez días; otra opción es la incorporación de materia orgánica en el suelo a base de tierra de lombrices: se aplica una palada mediana por arbusto, dos veces durante la estación.
Algo muy importante a tener en cuenta que el aumento de la humedad, favorece la aparición de hongos en el follaje (oidio, mildew, fumagina) provocando la falta de luz y oxígeno a las hojas siendo el resultado el manchado, rotura y deterioro generalizado del vegetal. El control se hará estableciendo un calendario de tratamiento preventivo, al principio en otoño, con un caldo mixto insecticida – fungicida (preparado como lo indica el marbete) cada 20 días y en invierno con aceite mineral (al 5%) y hasta tres aplicaciones, una cada mes. Controlar caracoles babosas y orugas.
La vegetación que invade los canteros, como las malezas, hay que eliminarlas continuamente, estas compiten por nutrientes y agua.. Además no hay que dejar que semillen, puesto que las mismas caen y germinan con facilidad haciendo que la invasión muchas veces sea incontrolable.
Se puede comenzar con la preparación de los canteros destinados a las bulbosas, es el momento ideal y los comercios ya están recibiendo todo tipo de órganos para la temporada, es tiempo de la compra.. están frescos, turgentes y sanos.
La mezcla para cantero debe ser muy rica y suelta; los sustratos ideales, además de nuestro suelo de jardín, son turba, resaca, compost, arena y tierra de lombrices., todo en partes iguales se incorpora al cantero y se asientan las bulbosas. Las especies recomendadas para esta temporada son las siguientes: Tulipan, Narciso, Jacinto, Hippeastrum, Crocus, iris.. y no te olvides de los ajos y cebollas que tienen una floración más que espectacular! Recordar que todas estas plantas requieren de mucho sol.
También es época de seleccionar las especies trepadoras que deseamos que en la primavera siguiente estén bien arraigadas y con producción de flores, entonces hay que recurrir a un buen proveedor, comprarlas y plantarlas ya!! (Recomiendo una poda suave antes de la plantación). La forma de encarar la plantación será: elegir el lugar más adecuado junto a una pared, cerco o pérgola y fijar un soporte para sostener al comienzo la planta. Realizar un hoyo a 40 cm. de una pared o columna y si es un cerco, 30 cm es suficiente. Fijar el soporte y añadir tierra preparada con un sustrato rico y suelto, agregar tres cucharadas de harina de hueso y plantar; cubrir y afirmar, nivelar y regar abundantemente hasta inundación durante dos o tres días, luego mantener húmedo. Sujete todas las ramas con alambre de tutorar sin dañar los tejidos y cubra el suelo con un manto de jardín de hojas no muy duras o con astillas.
Las tareas parecen muchas no? Pero nada imposible para una buena lectora jardinera.