La persona reflejada en los pies

Por Alicia López Blanco, autora de «Mi cuerpo, mi maestro», Ed. Albatros.

Todos los planos de la persona se encuentran reflejados en los pies del mismo modo que lo están los distintos órganos y las partes del cuerpo. Aspectos relativos a la mente, la capacidad de acción, las emociones y los instintos pueden ubicarse en zonas reflejas concretas que se superponen e implican con las áreas reflejas corporales.

Los dedos se corresponden con el área de cabeza y, por ende, con la mental y en ellos se refleja la base operativa del organismo. Es la sede del control, las ideas, los proyectos, el pensamiento, la imaginación, el vuelo creativo, la comunicación y la capacidad de observación. Desequilibrios en esa área podrían expresarse como obsesiones o pensamientos recurrentes; dificultades en la comunicación, atención o memoria; exceso de control o descontrol en relación con uno mismo o en la relación con los otros.

El estímulo reflexológico aplicado a los dedos de los pies facilita la fluidez y el equilibrio del pensamiento y la comunicación así como el desarrollo de la imaginación y la creatividad.

El colchón metatarsiano representa la zona del pecho, la espalda y los brazos. Es el área del impulso y la acción por ser esta zona del cuerpo la que alberga órganos como el corazón, motor de todo el organismo, y los pulmones, su filtro vital. En esa área se reflejan los sentimientos, la identidad, el ego, el impulso, la responsabilidad, la capacidad de alcanzar lo deseado, de satisfacer las propias necesidades, de abrazar, sostener y retener. Desórdenes del área podrían hacerse evidentes mediante síntomas como: impulsividad desmedida, inacción, sentimientos de culpa, angustia, dificultades para reconocer y/o expresar los afectos, desconexión con el propio deseo, sensación de sobrecarga o agobio e impedimentos en el acto de dar o recibir tanto en el plano material como en el afectivo. La aplicación de técnicas de reflexología en el área promueve, entre otras cosas, la acción hacia metas, el entusiasmo por la vida en general, el reconocimiento de los propios deseos y la expresión de los afectos.

La bóveda y el istmo plantar representan el área del abdomen y el espacio en el que, frecuentemente, se expresan las emociones. En esta zona se reflejan el movimiento, la adaptabilidad, la capacidad para aceptar, asimilar, transformar, aprovechar lo que la vida brinda y fluir con sus acontecimientos, afectos y sentimientos. También la capacidad empática, la vulnerabilidad y la sensibilidad. Los desequilibrios de esa área podrían expresarse como falta de fluidez y movimiento en la vida, estancamiento, desborde emocional, hipersensibilidad, dependencia y adicciones en general. El trabajo reflexológico en esta área estimula la sensibilidad en general y la capacidad de movimiento, fluidez y adaptación.

El talón representa el área pélvica, la zona más primaria del organismo, la más instintiva. Allí se reflejan aspectos relacionados con la supervivencia, tales como la alimentación, la vivienda, el trabajo, el sustento, la familia, los hijos, los aspectos hogareños, la autoridad, los límites, el descanso y la sexualidad. La capacidad de sostener, cuidar y proteger, la satisfacción de las propias necesidades, la capacidad de soltar o desprenderse de aquello que no es de utilidad o perjudica, de cambio y de disfrute. Cuando este plano está en desequilibrio, puede expresarse como apego excesivo incluso a lo considerado tóxico, dificultad para los cambios, problemas sexuales, dificultades para la concreción de proyectos, sensación de falta de sostén, estabilidad o rumbo o cualquier problemática que involucre necesidades básicas.

Tipología

Las tipologías son sistemas de clasificación que agrupan y ordenan patrones generales y habituales de comportamiento de los individuos basados en un número pequeño de características. Cada persona presenta combinaciones complejas y particulares pero, en general, es esperable que se adecue a una tendencia general en relación con algunos rasgos.

La forma de los pies puede dejar en evidencia estas características generales relativas tanto a factores constitucionales como a potenciales básicos. Estos factores afectan significativamente la manera del individuo de incursionar en este mundo y marcan tendencias en su conducta.

Partiendo de la base de que no existen tipos puros, se describen a continua- ción los principales. Para distinguirlos es necesario observar la apariencia general del pie y cuatro zonas fácilmente reconocibles en la planta: los dedos, el colchón metatarsiano, la bóveda e istmo plantar y el talón.

Tipo mental

Estas personas presentan un rico mundo intelectual. Tienen capacidad para generar proyectos aunque no siempre pueden llevarlos a cabo. Suelen ser creativos, con gran capacidad de imaginación. Piensan antes de actuar. Con cierta inclinación a la frialdad en los vínculos y a dominar con sutileza. Tienen facilitado el desapego. Podrían experimentar dificultades para tomar contacto con las emociones propias y ajenas. Muestran tendencia a la irritabilidad, el pesimismo, la indecisión y la elucubración.

Pies largos, angostos, alargados. Dedos largos y finos. Colchón metatarsiano con poca consistencia. Bóveda plantar extendida con istmo angosto. Talón pequeño. Tienden a la palidez en la coloración y a temperatura fría.

TIPO MENTAL: FANTASIOSO. CREATIVO. DOCENTE. RACIONAL. REFLEXIVO. INTROVERTIDO. DESAPEGADO. FRÍO. RETRAÍDO. IRRITABLE. PESIMISTA.

Tipo impulsivo

Personas entusiastas, ansiosas e impacientes. Suelen dejarse llevar por arre- batos. Buscan la satisfacción de su ego. Tienden a imponerse desde la acción y a alterar de modo activo las condiciones de la propia vida. Son proclives a las relaciones públicas y el contacto humano en general. Establecen vínculos apasionados. Pueden tener dificultad para ver al otro como es. Ejercen una fuerte influencia, control y dominio entre quienes lo rodean. Por momentos desbordan energía y en otros caen en estados depresivos. Presentan dificultades para mediatizar entre el deseo y la satisfacción del mismo. Alta preocupación por su estatus e imagen.

Pies con forma de triángulo invertido. Dedos medianos con relación a la longitud y el grosor. Colchón metatarsiano notablemente ancho. Bóveda plantar pequeña. Istmo ancho. Talón pequeño o mediano. Tendencia a la coloración rosada y temperatura cálida.

TIPO IMPULSIVO: AMBICIOSO. TRABAJADOR. ENTUSIASTA. IMPULSIVO. EMOTIVO. ANSIOSO. CÍCLICO. EGOCÉNTRICO. DOMINANTE. INFLUYENTE. PROTECTOR.

Tipo emocional

Personas tendientes a actuar lo que le dictan sus emociones. Tienden a hacer cosas por y para los demás y a aliviar los problemas de los otros. Poseen gran capacidad empática. Pueden ser dependientes en cualquier aspecto: las relaciones, las sustancias u adicciones en general. Una fuerte conexión con el inconsciente los hace muy intuitivos. Suelen comprometerse profundamente con la gente y sus quehaceres. Se inclinan por lo artístico y lo terapéutico.

Pies regulares en todas sus zonas. Dedos medianos. Colchón metatarsiano mediano. Bóveda plantar muy amplia con istmo angosto. Talón mediano. Tendencia a la coloración rosada y temperatura fresca.

TIPO EMOCIONAL: AFECTIVO. ARTÍSTICO. INFLUENCIABLE. ADAPTABLE. INTUITIVO. COMPROMETIDO. COOPERATIVO. SOLIDARIO.

Tipo instintivo

Son personas que al actuar dan prioridad a la satisfacción de sus necesidades básicas: alimentación, techo, familia, hijos, sexo. Brindan y necesitan sostén y seguridad. Suelen ser poco emotivas. Son perseverantes, pacientes y ordenados, pero con poca capacidad ejecutiva. Demarcan claramente su territorio. Tienen tendencia a ser conservadores, les cuesta aceptar las diferencias y adaptarse o ponerse en el lugar del otro. Experimentan apego a sus pertenencias en todo sentido. Poseen alto sentido del deber y la responsabilidad. En la amistad acompañan sin exageraciones, pero con solidez. Son confiables, estables y sin contradicciones.

Pie ancho y consistente, de forma cuadrada. Dedos cortos y gruesos. Colchón metatarsiano apenas más ancho que el talón. Bóveda plantar e istmo medianos. Talón ancho, prominente. Tendencia a la coloración amarillenta o amarronada, temperatura fría.

TIPO INSTINTIVO: PROVEEDOR. CONSERVADOR. ESTRUCTURADO. APEGADO. RESPONSABLE. CONFIABLE. SEGURO. CONCRETO. TERCO. SÓLIDO. RESISTENTE. PASIVO.

Por Alicia López Blanco, autora de «Mi cuerpo, mi maestro», Ed. Albatros.

Todos los planos de la persona se encuentran reflejados en los pies del mismo modo que lo están los distintos órganos y las partes del cuerpo. Aspectos relativos a la mente, la capacidad de acción, las emociones y los instintos pueden ubicarse en zonas reflejas concretas que se superponen e implican con las áreas reflejas corporales.

Los dedos se corresponden con el área de cabeza y, por ende, con la mental y en ellos se refleja la base operativa del organismo. Es la sede del control, las ideas, los proyectos, el pensamiento, la imaginación, el vuelo creativo, la comunicación y la capacidad de observación. Desequilibrios en esa área podrían expresarse como obsesiones o pensamientos recurrentes; dificultades en la comunicación, atención o memoria; exceso de control o descontrol en relación con uno mismo o en la relación con los otros.

El estímulo reflexológico aplicado a los dedos de los pies facilita la fluidez y el equilibrio del pensamiento y la comunicación así como el desarrollo de la imaginación y la creatividad.

El colchón metatarsiano representa la zona del pecho, la espalda y los brazos. Es el área del impulso y la acción por ser esta zona del cuerpo la que alberga órganos como el corazón, motor de todo el organismo, y los pulmones, su filtro vital. En esa área se reflejan los sentimientos, la identidad, el ego, el impulso, la responsabilidad, la capacidad de alcanzar lo deseado, de satisfacer las propias necesidades, de abrazar, sostener y retener. Desórdenes del área podrían hacerse evidentes mediante síntomas como: impulsividad desmedida, inacción, sentimientos de culpa, angustia, dificultades para reconocer y/o expresar los afectos, desconexión con el propio deseo, sensación de sobrecarga o agobio e impedimentos en el acto de dar o recibir tanto en el plano material como en el afectivo. La aplicación de técnicas de reflexología en el área promueve, entre otras cosas, la acción hacia metas, el entusiasmo por la vida en general, el reconocimiento de los propios deseos y la expresión de los afectos.

La bóveda y el istmo plantar representan el área del abdomen y el espacio en el que, frecuentemente, se expresan las emociones. En esta zona se reflejan el movimiento, la adaptabilidad, la capacidad para aceptar, asimilar, transformar, aprovechar lo que la vida brinda y fluir con sus acontecimientos, afectos y sentimientos. También la capacidad empática, la vulnerabilidad y la sensibilidad. Los desequilibrios de esa área podrían expresarse como falta de fluidez y movimiento en la vida, estancamiento, desborde emocional, hipersensibilidad, dependencia y adicciones en general. El trabajo reflexológico en esta área estimula la sensibilidad en general y la capacidad de movimiento, fluidez y adaptación.

El talón representa el área pélvica, la zona más primaria del organismo, la más instintiva. Allí se reflejan aspectos relacionados con la supervivencia, tales como la alimentación, la vivienda, el trabajo, el sustento, la familia, los hijos, los aspectos hogareños, la autoridad, los límites, el descanso y la sexualidad. La capacidad de sostener, cuidar y proteger, la satisfacción de las propias necesidades, la capacidad de soltar o desprenderse de aquello que no es de utilidad o perjudica, de cambio y de disfrute. Cuando este plano está en desequilibrio, puede expresarse como apego excesivo incluso a lo considerado tóxico, dificultad para los cambios, problemas sexuales, dificultades para la concreción de proyectos, sensación de falta de sostén, estabilidad o rumbo o cualquier problemática que involucre necesidades básicas.

Tipología

Las tipologías son sistemas de clasificación que agrupan y ordenan patrones generales y habituales de comportamiento de los individuos basados en un número pequeño de características. Cada persona presenta combinaciones complejas y particulares pero, en general, es esperable que se adecue a una tendencia general en relación con algunos rasgos.

La forma de los pies puede dejar en evidencia estas características generales relativas tanto a factores constitucionales como a potenciales básicos. Estos factores afectan significativamente la manera del individuo de incursionar en este mundo y marcan tendencias en su conducta.

Partiendo de la base de que no existen tipos puros, se describen a continua- ción los principales. Para distinguirlos es necesario observar la apariencia general del pie y cuatro zonas fácilmente reconocibles en la planta: los dedos, el colchón metatarsiano, la bóveda e istmo plantar y el talón.

Tipo mental

Estas personas presentan un rico mundo intelectual. Tienen capacidad para generar proyectos aunque no siempre pueden llevarlos a cabo. Suelen ser creativos, con gran capacidad de imaginación. Piensan antes de actuar. Con cierta inclinación a la frialdad en los vínculos y a dominar con sutileza. Tienen facilitado el desapego. Podrían experimentar dificultades para tomar contacto con las emociones propias y ajenas. Muestran tendencia a la irritabilidad, el pesimismo, la indecisión y la elucubración.

Pies largos, angostos, alargados. Dedos largos y finos. Colchón metatarsiano con poca consistencia. Bóveda plantar extendida con istmo angosto. Talón pequeño. Tienden a la palidez en la coloración y a temperatura fría.

TIPO MENTAL: FANTASIOSO. CREATIVO. DOCENTE. RACIONAL. REFLEXIVO. INTROVERTIDO. DESAPEGADO. FRÍO. RETRAÍDO. IRRITABLE. PESIMISTA.

Tipo impulsivo

Personas entusiastas, ansiosas e impacientes. Suelen dejarse llevar por arre- batos. Buscan la satisfacción de su ego. Tienden a imponerse desde la acción y a alterar de modo activo las condiciones de la propia vida. Son proclives a las relaciones públicas y el contacto humano en general. Establecen vínculos apasionados. Pueden tener dificultad para ver al otro como es. Ejercen una fuerte influencia, control y dominio entre quienes lo rodean. Por momentos desbordan energía y en otros caen en estados depresivos. Presentan dificultades para mediatizar entre el deseo y la satisfacción del mismo. Alta preocupación por su estatus e imagen.

Pies con forma de triángulo invertido. Dedos medianos con relación a la longitud y el grosor. Colchón metatarsiano notablemente ancho. Bóveda plantar pequeña. Istmo ancho. Talón pequeño o mediano. Tendencia a la coloración rosada y temperatura cálida.

TIPO IMPULSIVO: AMBICIOSO. TRABAJADOR. ENTUSIASTA. IMPULSIVO. EMOTIVO. ANSIOSO. CÍCLICO. EGOCÉNTRICO. DOMINANTE. INFLUYENTE. PROTECTOR.

Tipo emocional

Personas tendientes a actuar lo que le dictan sus emociones. Tienden a hacer cosas por y para los demás y a aliviar los problemas de los otros. Poseen gran capacidad empática. Pueden ser dependientes en cualquier aspecto: las relaciones, las sustancias u adicciones en general. Una fuerte conexión con el inconsciente los hace muy intuitivos. Suelen comprometerse profundamente con la gente y sus quehaceres. Se inclinan por lo artístico y lo terapéutico.

Pies regulares en todas sus zonas. Dedos medianos. Colchón metatarsiano mediano. Bóveda plantar muy amplia con istmo angosto. Talón mediano. Tendencia a la coloración rosada y temperatura fresca.

TIPO EMOCIONAL: AFECTIVO. ARTÍSTICO. INFLUENCIABLE. ADAPTABLE. INTUITIVO. COMPROMETIDO. COOPERATIVO. SOLIDARIO.

Tipo instintivo

Son personas que al actuar dan prioridad a la satisfacción de sus necesidades básicas: alimentación, techo, familia, hijos, sexo. Brindan y necesitan sostén y seguridad. Suelen ser poco emotivas. Son perseverantes, pacientes y ordenados, pero con poca capacidad ejecutiva. Demarcan claramente su territorio. Tienen tendencia a ser conservadores, les cuesta aceptar las diferencias y adaptarse o ponerse en el lugar del otro. Experimentan apego a sus pertenencias en todo sentido. Poseen alto sentido del deber y la responsabilidad. En la amistad acompañan sin exageraciones, pero con solidez. Son confiables, estables y sin contradicciones.

Pie ancho y consistente, de forma cuadrada. Dedos cortos y gruesos. Colchón metatarsiano apenas más ancho que el talón. Bóveda plantar e istmo medianos. Talón ancho, prominente. Tendencia a la coloración amarillenta o amarronada, temperatura fría.

TIPO INSTINTIVO: PROVEEDOR. CONSERVADOR. ESTRUCTURADO. APEGADO. RESPONSABLE. CONFIABLE. SEGURO. CONCRETO. TERCO. SÓLIDO. RESISTENTE. PASIVO.