Por Flavia Tomaello, https://flaviatomaello.blog/, Instagram @flavia.tomaello
Fue un giro del destino cuando Vipp comenzó a ampliar su oferta desde contenedores, cocinas y muebles controlados por pedal al negocio de la hostelería en 2014. Hoy en día, la empresa de diseño danesa gestiona una cartera total de siete casas de huéspedes y más por venir.
Mientras vivía en la ciudad de Nueva York con su familia entre 2008 y 2010, Kasper Egelund, director ejecutivo y propietario de tercera generación de Vipp, soñaba con un lugar donde pudiera escapar del constante bullicio y las interrupciones de la vida moderna en la ciudad para estar al aire libre en la naturaleza. Entonces se le ocurrió la idea de diseñar una escapada plug and play que conectara el diseño moderno con la naturaleza.
«Después de mucha sangre, sudor y lágrimas, finalmente pudimos revelar Vipp Shelter, un prototipo de cabaña prefabricada diseñada en colaboración con el estudio de arquitectura danés Arcgency en 2014. El propósito de la sala de exposición era invitar a la gente a venir y probar antes. compran su propia cabaña con todo incluido», explica Kasper Egelund.
Con su ubicación única en el bosque a orillas del lago Immeln en Suecia combinada con el distintivo diseño minimalista de Vipp, la marca danesa experimentó una respuesta masiva.
Desde el día de su lanzamiento al público, Vipp se vio inundado de entusiastas del diseño de todo el mundo que querían reservar una estancia: «La respuesta fue tan abrumadora que decidimos transformar Vipp Shelter de un producto para comprar en lo que se convirtió en nuestra primera casa de huéspedes», explica Kasper Egelund.
Si bien cada una de las siete casas de huéspedes de Vipp es única, tienen algunas cosas en común. Lo principal es el objetivo general de invitar a la gente a experimentar de primera mano el diseño de la marca en lugares fuera de lo común.
El Vipp Shelter consta de una sencilla rejilla de acero con marcos de ventanas corredizas que van del suelo al techo y que invitan a los huéspedes a disfrutar de unas vistas despejadas del lago Immeln y los bosques circundantes. La elección del material, el acero, es un guiño a la herencia de 85 años de Vipp que comenzó con un contenedor de pedal de acero en 1939.
Los interiores del refugio de dos niveles de 55 metros cuadrados (592 pies cuadrados), dominados por tonos oscuros para concentrarse en la naturaleza, incluyen una cocina de planta abierta y un comedor con chimenea, una sala de estar con vistas panorámicas al lago y un baño con una ducha.
Una escalera conduce al dormitorio tipo loft abierto, que tiene espacio suficiente para que dos personas se acurruquen cómodamente. Los tragaluces arriba y las ventanas al lado de la cama permiten a los huéspedes conciliar el sueño bajo las estrellas.