03/07/2007 - Buenos Aires - Hilda González, senadora y esposa del ex presidente Eduardo Duhalde (2002-2003), acusó a Fernández de haber "mostrado desprecio por la pobreza" y de estar "muy preocupada por su aspecto físico y por viajar por el mundo".
La mujer del actual jefe de Estado, el peronista Néstor Kirchner, quedó en el centro de la escena política de Argentina desde que el pasado domingo el oficialismo confirmó su postulación para las elecciones generales del 28 de octubre próximo.
Por el protagonismo que cobró en los últimos años, Cristina Fernández es comparada con María Eva Duarte y María Estela Martínez, quienes fueron esposas de Juan Perón, elegido presidente en tres ocasiones y fundador del Partido Justicialista (PJ, peronista).
"Evita" Duarte (1919-1952) fue ungida por las clases populares como la "abanderada de los humildes" pese a que nunca llegó a ocupar un cargo en la administración de su marido, quien gobernó el país de 1945 a 1955 y desde 1973 hasta su fallecimiento, un año después.
En cambio, "Isabel" Martínez fue compañera de fórmula de Perón más por decisión del general que por vocación propia, y tras la muerte del anciano líder ejerció la presidencia en una etapa marcada por la violencia que desembocó en su derrocamiento por un golpe militar en 1976.
"La esposa presidencial como la mejor candidata a la sucesión es característica del modo de conducción del peronismo, un cesarismo populista cuyo jefe es siempre el que mejor decide", aseguró a Efe la historiadora María Sáenz Quesada.
Por su parte, Hilda González declaró a radios de Buenos Aires que lamenta que el PJ sea "un perrito faldero que acepta con resignación la decisión" de Kirchner de dejar la candidatura presidencial en manos de su esposa, que también es senadora y tiene 54 años.
La mujer de Duhalde, predecesor y ex aliado de Kirchner, pertenece a un sector del peronismo que en los comicios legislativos de 2005 enfrentó a Cristina Fernández, quien obtuvo más del doble de votos que su rival.
"El rol electoral de Cristina es muy importante, como se hizo evidente hace dos años", opinó el analista Rosendo Fraga, quien atribuyó a la primera dama el mérito de "quebrar la hegemonía de Duhalde" con su contundente victoria sobre "Chiche" González.
Para el experto, "la esposa de Kirchner es hoy la dirigente con mejor imagen en Argentina después del primer mandatario" y "en términos de cultura política, las mujeres de los líderes en el peronismo suelen tener un rol político".
"En mi opinión, Cristina no es Evita y Kirchner no es Perón. El fundador del peronismo y su (segunda) esposa son un fenómeno irrepetible en la política argentina. La historia se parece, pero nunca se repite exactamente", aseguró a Efe.
Por su parte, el historiador Felipe Pigna estimó que en cuanto al "rol de la mujer en la política hay un antes y un después de Evita", quien con su lucha por los desposeídos logró construir "casi un liderazgo propio", aunque "siempre a la sombra de Perón".
"El de Isabel es un caso menor, al que evidentemente no se puede comparar con el de Evita, ya que cumplió los roles que Perón le encargó y su paso por la presidencia fue una desgracia. Lo único que tienen en común es que fueron esposas de Perón", indicó.
En tanto, al ser consultado por Efe el analista y encuestador Roberto Bacman consideró que "Cristina tiene más vuelo propio, es un cuadro que surge de la política y no tiene nada que ver con la Isabel de los años 70, que era la mujer de Perón y punto".
"Por algo a Cristina no le gusta que le llamen Kirchner", sostuvo antes de aventurar que, en caso de convertirse en la primera mujer elegida presidenta por la ciudadanía argentina, "hasta es posible que tenga otro estilo de conducción y de gobierno" que su marido.
Kirchner, que viene colmando de elogios a su esposa y ha definido a su candidatura como "un paso superador", señaló hoy que "la profundización del cambio viene de la mano de una mujer que va a hacer muchísimo mejor gobierno que el que hicimos hasta ahora". EFE