21/07/2007 - Buenos Aires - Unos 400 manifestantes tomaron el ayuntamiento de Puerto Deseado, tras ser informados de que el alcalde, Arturo Rodríguez, no les podía recibir por estar ausente, asistiendo a un acto político del presidente Néstor Kirchner en la cercana localidad de Puerto Santa Cruz.
Una fuente policial dijo a Efe que los manifestantes provocaron incendios y destrozos en plantas y vehículos de cinco empresas pesqueras, aunque portavoces de algunas empresas dijeron que el número de compañías afectadas llega a nueve.
Estos señalaron a Efe que las pesqueras atacadas son las españolas Arbumasa, Argenova (del grupo Pescanova), Empesur, Pescargen, Santa Cruz y Vieira; las argentinas Santa Elena y CARSA, y Pezpasa, de capital japonés y suizo.
Explicaron que todas esas empresas comparten un parque industrial cuyo acceso permanece cortado por piquetes de huelguistas.
En un depósito de Arbumasa los bomberos y la Prefectura Naval (guardacostas) intentaban esta noche sofocar el incendio que provocaron los trabajadores, precisó el portavoz de la policía, quien indicó que hasta el momento no se habían producido ni víctimas ni detenidos.
"Hay un caos porque no hubo respuestas de las autoridades a nuestros reclamos. Queremos que nos escuchen", manifestó a su vez Daniel Medina, delegado del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos en Puerto Deseado, a unos 2.900 kilómetros al sur de Buenos Aires.
"El ánimo es que se solucione el conflicto en forma negociada y el alcalde está en viaje hacia Puerto Deseado", aseguró la fuente policial.
La ciudad es uno de los principales puertos pesqueros del país, que aporta el 30 por ciento de las exportaciones de un sector con fuerte presencia de capital español, y con una facturación anual que supera los 300 millones de dólares.
"Ya hay desabastecimiento de productos en el mercado interno, sobre todo merluza", señaló sobre las consecuencias de la huelga Alfredo Pott, presidente de la Cámara de Armadores Pesqueros Congeladores de Argentina (Capeca).
Según ese organismo, el conflicto podría causar unas pérdidas de 100 millones de dólares por incumplimiento de contratos y el riesgo de que la mercancía almacenada se pierda.
El canciller de Argentina, Jorge Taiana, comunicó a su colega español, Miguel Angel Moratinos, el repudio del Gobierno argentino a los ataques y destrozos que sufrieron las pesqueras españolas, informaron a Efe fuentes oficiales argentinas.
Los portavoces indicaron que Taiana y Moratinos hablaron varias veces por teléfono debido a estos graves incidentes.
Horas después, la embajada de España en Argentina hizo pública una nota de prensa en la que solicita a las autoridades de la provincia de Santa Cruz y del gobierno argentino que adopten las medidas necesarias para poner fin a la violencia.
La nota señala que "ante los graves actos de violencia que se han producido (...) en Puerto Deseado, y que se han saldado con el incendio y destrucción de varias empresas pesqueras, la Embajada de España ha mantenido comunicación permanente con los empresarios afectados para conocer fielmente la situación"
Igualmente, la nota informa de que "ha pedido a las autoridades de la Provincia de Santa Cruz y del Gobierno Nacional que adopten las medidas necesarias a fin de poner fin a la violencia y garantizar la seguridad de las personas y de los bienes". EFE