28/07/2007 - Buenos Aires - El ministro de Economía, Miguel Peirano, anunció que se propondrá al Parlamento, controlado por el oficialismo, una reducción del impuesto a los ingresos con la que el Fisco perderá una recaudación anual de 1.500 millones de pesos (474 millones de dólares).
Acompañado por otros funcionarios y sindicalistas, Peirano explicó que la reforma impositiva se aplicará con retroactividad al 1 de enero pasado y aumenta los montos salariales a partir de los cuales se paga el Impuesto a las Ganancias, un tributo al ingreso.
A diferencia de una medida similar aplicada en marzo pasado también a petición de los sindicatos, esta reforma aumenta además el monto de los gastos que se pueden deducir del impuesto, como los de seguros, asistencia médica e hipotecas, entre otros.
Establece que los trabajadores casados y con dos hijos pagarán el tributo a los ingresos a partir de un salario de 4.600 pesos (1.455 dólares), mientras que los solteros lo harán a partir de los 3.400 pesos (1.075 dólares).
Actualmente, los empleados casados pagan impuestos a partir de un salario superior a los 4.200 pesos (1.329 dólares) y los solteros desde ingresos mayores a 3.200 pesos (1.012 dólares).
Hugo Moyano, el líder de la Confederación General del Trabajo, el mayor sindicato del país y afín al gobernante Partido Justicialista (peronista), destacó que esta reforma mejora la distribución del ingreso y contribuirá a solucionar conflictos salariales.
La presión del Fisco ha sido uno de los factores de un largo conflicto salarial que el viernes pasado desembocó en un ataque de trabajadores que causó grandes pérdidas y destrozos en empresas pesqueras, la mayoría españolas, en Puerto Deseado (Santa Cruz), la provincia natal del presidente argentino, Néstor Kirchner.
También rechazan la presión impositiva trabajadores de empresas petroleras de Santa Cruz que el martes pasado levantaron una huelga a cambio de un aumento salarial del 30 por ciento y la promesa de que se reducirá el Impuesto a las Ganancias.
Los salarios en Santa Cruz y otras provincias de la Patagonia argentina son los más altos del país debido a que el coste de vida es más caro en esa región.
Los expertos coinciden en que las rebajas en el impuesto a los ingresos no tienen mayor impacto en las arcas del Tesoro porque alientan un mayor consumo, con lo que el Fisco recupera buena parte de lo perdido con la recaudación del Impuesto al Valor Añadido, que en este país es del 21 por ciento, uno de los más altos del mundo.
El Tesoro argentino lleva cuatro años consecutivos de superávit y la recaudación de impuestos en 2006 alcanzó a la cifra récord de 150.008,7 millones de pesos (48.079 millones de dólares), un 25,8 por ciento más que la de 2005. EFE