15/08/2007 - Buenos Aires (EFE).- Mario Ochoa había sido puesto en libertad en julio pasado por el tribunal que le juzgó, decisión que este martes fue revocada por la Cámara de Casación de la provincia de Buenos Aires, que ordenó su inmediata detención.
Además de generar un enérgico repudio por parte de los familiares de las víctimas, la decisión de los jueces de permitir que el condenado siguiese libre hasta que la sentencia quede firme despertó una fuerte polémica en Argentina.
A raíz de esta situación, un abogado solicitó hoy a la Suprema Corte de Justicia bonaerense que analice la posibilidad de que los integrantes del tribunal que concedió la libertad a Ochoa sean sometidos a un juicio político con fines de destitución por "mal desempeño de sus funciones".
En su presentación, Gregorio Dalbón sostuvo que "sin perjuicio de que la ley permite este tipo de decisión judicial, los jueces no analizaron con sana crítica la posibilidad de tomar las medidas adecuadas de seguridad a fin de evitar la fuga del condenado".
El abusador desapareció el martes por la tarde, luego de que la justicia ordenó su detención, por lo que el Ministerio del Interior hoy estableció una recompensa de 100.000 pesos (unos 31.400 dólares) para quien aporte datos que permitan la captura del prófugo.
Según la sentencia dictada el 20 de julio, Ochoa abusó sexualmente de al menos 13 menores con distintas discapacidades entre 1999 y 2002.
El hombre era chófer de una camioneta que trasladaba alumnos de un colegio para discapacitados de la periferia de Buenos Aires y la causa judicial en su contra se inició cuando la madre de una chica hizo la primera de las denuncias ante una docente.
El acusado ya había estado tres años preso, pero llegó en libertad al juicio, durante el cual la Fiscalía había reclamado que le condenasen a 30 años de prisión. EFE
