01/09/2009 - Tras acusar a la oposición de "no querer tratar nunca este tema", el jefe del grupo de legisladores oficialistas, Agustín Rossi, se declaró hoy "optimista" en que la normativa será aprobada por "un buen número" de miembros de la Cámara de Diputados.
"Siempre toda ley es factible de ser modificada, pero obviamente se le prestará mayor atención a aquellas iniciativas que provengan de diputados o bloques que no tengan una actitud obstruccionista con el tratamiento de la ley", aseguró a radios locales.
El proyecto de ley de Comunicación Audiovisual impulsado por el Gobierno, que busca reformar la ley de radiodifusión dictada en 1980, durante la dictadura (1976-1983), comenzará a ser debatido el jueves en comisiones de diputados frente a un generalizado rechazo opositor y de las asociaciones de prensa y canales de televisión.
La mayor parte del arco opositor exige tratar la reforma después del 10 de diciembre, cuando asumirán los legisladores elegidos en los comicios de junio, en los que el oficialismo peronista fue derrotado y perderá su mayoría propia en el Parlamento.
La reforma, que el Gobierno asegura haber redactado con base en normativas de Estados Unidos y el Reino Unido, afecta los intereses de grandes conglomerados de medios de comunicación en manos de capitales argentinos, españoles, estadounidenses y mexicanos, entre otros.
Uno de los puntos polémicos de la reforma, de la que se conocen pocos detalles, establece que las empresas pueden tener hasta 10 licencias de radio y televisión, 14 menos que el límite actual.
Fuentes oficiales señalaron a Efe que la iniciativa gubernamental va a ratificar el criterio vigente de un 30 por ciento de inversión extranjera como tope en el sector.
"El oficialismo lo único que quiere es controlar a todos los medios de comunicación", aseguró Gerardo Morales, el líder de la Unión Cívica Radical, segunda fuerza parlamentaria, que está aliada a la Coalición Cívica de socialistas e independientes en el Acuerdo Cívico y Social.
"Este proyecto contiene normas que afectan la seguridad jurídica y la libertad de expresión. No tengo ninguna duda que detrás está la intención del Gobierno por controlar a los medios" insistió.
Morales opinó que la oposición no debería dar quórum parlamentario para tratar la reforma y remarcó que "tampoco" tiene "dudas" de que el Gobierno de Cristina Fernández "quiere convertir a Argentina en la Venezuela de (Hugo) Chávez".
En términos similares se han expresado dirigentes de la coalición Unión-Pro, formada por peronistas disidentes y la conservadora Propuesta Republicana (Pro).
La diputada Margarita Stolbizer, de la coalición que integra Morales, opinó que "se debe debatir ahora" aunque matizó que "no es posible plantear ni un tratamiento rápido que impida el debate ni tampoco esperar a diciembre".
La oposición objeta que la reforma suponga una mayoría oficialista en los mecanismos estatales de control de la radiodifusión, así como los límites a las concesiones de frecuencias de radio y televisión, que en un 33 por ciento deberán ser adjudicadas a organizaciones sin fines de lucro.
El diputado oficialista Ariel Pasini exigió a su colega Francisco De Narváez, de Unión-Pro, que se abstenga de los debates porque "es parte interesada" en su condición de accionista de un grupo multimedia.
Mientras, el diputado conservador Omar De Marchi impulsa una condena parlamentaria al director del organismo de control de la radiodifusión, Gabriel Mariotto, "por calificar a la oposición como vocera del establishment mediático".
Por su parte, la Asociación Argentina de Televisión por Cable exige participar "para debatir uno por uno todos los absurdos que contiene" el proyecto de Comunicación Audiovisual, y considera que el proyecto es "destructivo", "inapropiado" y "extorsiona" a las empresas.
Aunque coincide en la necesidad de actualizar la ley vigente, la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas ha reclamado excluir por completo la regulación sobre contenidos periodísticos, de información y de opinión, y las injerencias estatales en materia de programación. EFE