11/04/2008 - Argentinos y suecos coincidían antes de que comenzara la eliminatoria en la que el equipo local tenía amplias ventajas porque se disputa sobre una lenta pista de tierra batida del estadio Mary Terán de Weiss, en la que Soderling se adaptó perfectamente.
Nalbandian, sobre quien pesa ahora buena parte de la responsabilidad del pase de su equipo a las semifinales, rompió el equilibrio del encuentro en el sexto juego de la primera manga y tras ponerse 4-2 exhibió una notable gama de recursos que desbordaron a Johansson, con las que obtuvo una rápida ventaja
Nalbandian ganó trece puntos con el servicio de su rival, que cometió diez errores no forzados contra cuatro, sobre una pista pesada e irregular, que incomodó a ambos y provocó algunas sorpresas con raros botes de la bola.
El segundo set cambió radicalmente para el jugador local por la efectividad de Johansson para devolver sus saques. Preocupado por esa circunstancia, Nalbandian arriesgó más y falló de manera permanente.
Johansson ganó confianza, estuvo dos veces cerca de romper el servicio del cordobés y lo consiguió, con aplomo y soltura, en el undécimo juego.
Con el resultado a su favor en 6-5 y el servicio, el sueco remontó un 0-30, más tarde una bola de punto y ganó la manga ante el desconcierto de su rival, que cometió 15 errores no forzados y seis dobles faltas contra dos, y de un público que lo presionó en momentos clave.
Nalbandian reaccionó en el tercer capítulo, recuperó la precisión, falló muy poco, y quebró rápidamente el servicio de Johansson, que logró mantenerlo con esfuerzo en el cuarto y sexto juego y con alguna comodidad en el octavo.
Johansson se resistió, obtuvo el juego con el que el argentino estaba dispuesto a liquidar la manga, ofreció lucha hasta el final pero no logró impedir que éste alcanzara el 6-4 y el 2-1 en el marcador.
La ventaja no daba margen para que el local se relajara. El tenista sueco demostraba que los problemas que tuvo al principio con la lenta superficie del estadio Mary Terán de Weiss ya no eran tan graves para él, y que estaba dispuesto a dar batalla.
La concentración de Nalbandian en el cuarto set fue un factor decisivo para desequilibrar el partido en el sexto juego (4-2), solidificar su supremacía en el siguiente y dejar a su rival en una incómoda situación (5-2). Y no dio opciones a Johansson en el último juego, que ganó con determinación.
Soderling arrolló en la primera manga a Acasuso, con la firmeza de su servicio, con el alcanzó el 80 por ciento de los puntos en los primeros y el 100 en los segundos, y el aprovechamiento de los fallos de éste, inseguro y abúlico, que sólo dio batalla en el sexto juego que el sueco se adjudicó en el minuto 32 del choque.
Las diferencias de 10-5 y de 12-3 en los errores forzados y no forzados, respectivamente, y dos dobles faltas hundieron a Acasuso, que pareció tener problemas con la lenta superficie del estadio del Parque Roca ante un rival sólido y eficaz.
Acasuso aterrizó en el partido en el segundo set. Se mostró más activo, tomó la iniciativa en los primeros tramos y afinó la puntería. Quebró en el tercer juego el saque de Soderling, que se recuperó en el cuarto. Lo mismo ocurrió en el séptimo y el octavo y el choque, entonces, ya había adquirido color, al menos.
Pero el tenista europeo no se distrajo ni bajó la guardia pese a algunos errores cometidos, logró controlar los embates del local, que mezcló una de cal con una de arena, volvió a quedarse con el servicio de Acasuso y lo remató con un 6-4 inapelable.
A esas alturas, el hecho de que el visitante hubiera quebrado seis de ocho servicios del tenista de la provincia de Misiones no daba demasiadas esperanzas a los argentinos de sacar la ventaja en el marcador que se habían propuesto en la primera jornada.
Acasuso no levantó cabeza, y Sogerling volvió a pasarle por encima con un 6-1, pese a haber resignado 27 posibilidades de quiebre en todo el encuentro y haber concretado sólo ocho.
El tercer punto, en el que Suecia parece tener mejores posibilidades que Argentina, lo disputarán este sábado Nalbandian y Guillermo Cañas con Jonas Bjorkman y Robert Lindstedt.
El domingo cerrarán la eliminatoria Acasuso-Johansson y Nalbandian-Soderling. EFE