Viajera y entusiasta

Las mascotas son miembro muy especial de la familia. Existe una gran variedad de animales que elegimos como mascotas. Pero, además de ser una gran compañía, existen otras ventajas de las mascotas en casa. Después de leer la nota que les comparto de Siete Soles vas a querer agrandar la familia con tu animal favorito.

- Seguridad

Aunque no se trate de un animal entrenado,  las mascotas se acostumbran a un entorno y pueden percibir cuando algo raro está sucediendo, reaccionar a ello y encontrar la forma de hacértelo saber.

- Responsabilidad

Tener una mascota e involucrar a los chicos en su cuidado es una forma de enseñarles a ser responsables y generar vínculos de empatía, de interés por el bienestar ajeno, en este caso, una mascota pero que luego se replica a otras personas. Darles de comer a ciertos horarios y ciertos alimentos, bañarlos y otros cuidados son pequeñas acciones que contribuyen a desarrollar esta cualidad y a la generación de hábitos.

- Desarrollo de vínculos

Tener mascotas en casas, especialmente aquellas con las que se puede interactuar con más facilidad, es una excelente manera de generar vínculos afectivos así como a incentivar el desarrollo de la imaginación. Por ejemplo, en muchos casos, se “asignan” roles a un perro al jugar con ellos, así como también muchas veces se les cuenta cosas, se “habla” con ellos, se les cuentan confidencias.

- Ejercicio

Por otro lado, el hecho de tener una mascota que requiere gastar energía también nos obliga a participar del ejercicio. Por ejemplo, si tenemos que sacar a pasear al perro, necesariamente, tenemos que caminar o trotar algunas cuadras. O bien también podemos considerarlos como una fuente de motivación para empezar la actividad física y ser acompañados por ellos.

- Anti estrés y “anti” soledad

Varias investigaciones científicas realizadas demostraron que el hecho de tener una mascota funciona como una “terapia” para reducir el estrés. Así como también el hecho de que sean una compañía es un paliativo para no sentirse solos y para que nos levanten el ánimo cuando estamos tristes o deprimidos. ¿A quién no le da alegría cuando volvemos a casa y nuestra mascota nos sale a recibir alegre?

Por supuesto, también es bueno tener presente una serie de consejos para que las ventajas no se conviertan en desventajas. En primer lugar, al elegir nuestra mascota es importante tener en cuenta nuestro contexto en su totalidad. Es decir, pensar en la familia, en sus miembros, en el espacio del que disponemos, en los horarios que manejamos. Por ejemplo, si tenemos hijos pequeños, es posible que la mejor opción sea tener un perro de tamaño pequeño, que crezca a la par de nuestro hijo, y no uno grande, que pueda resultar torpe.

Y por último,  hay que considerar que las mascotas demandan atención y cuidado y que por eso mismo, necesitamos disponer de tiempo para ello, ya que nos estamos “agregando” una responsabilidad.