REVISTA OHLALÁ

ANOREXIA SEXUAL

28.12.2011 |

Así como quienes dejan de comer ponen en riesgo su vida, hay quienes se obsesionan de tal manera con el sexo que son capaces de cualquier cosa con tal de alejarlo de sus vidas.

http://www.revistaohlala.com/1371901-anorexia-sexual 

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ANOREXIA SEXUAL

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por Horacio Velmont

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Existen muchas razones para que se origine en una persona lo que los psicólogos denominan "anorexia sexual" (falta de libido o de apetito por el sexo), pero aquí vamos a abordar una de las causas ignoradas supinamente por la Psiquiatría.

Si a una persona se la hipnotiza y se le da la orden de que al despertar, cuando el operador se toque la corbata, sentirá que el sexo es repugnante, esa persona, cumpliendo la orden, lo sentirá así  y a cualquiera que le pregunte sobre el sexo le responderá de acuerdo a esa orden.

Si además el operador le da la orden de que cuando se toque la nariz sentirá que el sexo es lo más maravilloso que hay en el mundo, cuando el operador se toque la nariz esa persona cumplirá la orden tal cual y hablará maravillas del sexo sin importar que hace unos momentos decía que era repugnante.

Y así seguirá opinando de una forma u otra según el operador se toque la corbata o se toque la nariz, e inclusive en cada ocasión dando argumentos sobre por qué cambia de opinión. Y si hay público presenciando la escena que se ríe de esos cambios, nunca imaginará cuál es el motivo e incluso le parecerá lo más natural cambiar tan rápido de opinión.

En la vida de las personas existen muchas ocasiones en que se reciben órdenes hipnóticas, que técnicamente se denominan engramas. Los engramas se implantan en la mente reactiva, la segunda mente del hombre descubierta en la década del 40 por L. Ronald Hubbard y dada a conocer al mundo en el libro "Dianética, la ciencia moderna de la salud mental", siempre que exista inconsciencia, sea por algún golpe, por anestesia, o por el delirio de alguna enfermedad. 

La diferencia entre un engrama y una orden hipnótica es el dolor. El engrama, por definición, contiene dolor, mientras que la orden hipnótica no. Siempre que está presente el dolor, la inconsciencia será más profunda y más compulsiva será la orden que contenga. Naturalmente, si la orden hipnótica es acompañada de dolor, en nada se diferencia del engrama y tendrá el mismo poder compulsivo.

Una mujer que está en el quirófano completamente dormida por la anestesia graba todo lo que sucede en ese momento a nivel celular, tal como si estuviera en una sesión de hipnosis.  El dolor de la anestesia y del bisturí potencian la grabación.

Si por ejemplo una enfermera, que por casualidad tuvo la noche anterior una mala experiencia sexual, comenta a sus compañeros cirujanos que odia al sexo, las palabras que pronuncie se implantan en la mente reactiva de la paciente anestesiada como engrama, es decir, como una orden hipnótica de gran poder porque está presente el dolor.

Son restimuladores de ese engrama-orden hipnótica, entre otros percépticos, el olor ambiental, los ruidos, las palabras pronunciadas, el tono de las voces y el color de la sala.

Más tarde, en el hogar, puede suceder que el esposo tenga una voz parecida al de uno de los cirujanos, o la hija tenga el mismo color del cabello de una de las enfermeras. El resultado será que el engrama con el contenido verbal de odiar al sexo se restimulará crónicamente.

Quizás era una persona que gustaba del sexo y el cambio sorprende a todos, que no imaginan la razón de su cambio, y menos aún el psiquiatra al que va a pedir ayuda. 

Como la mente reactiva es un mecanismo irracional e impredecible, cualquier palabra en el engrama puede hacer que alguien odie al sexo, incluso aquellas palabras que no tengan connotación sexual alguna, como por ejemplo "no me vengas con eso" o "jamás lo haré".

Lo expuesto no significa, como ya adelantamos, que la anorexia sexual siempre tenga origen en un engrama, pues pueden haber muchas razones por las cuales una persona huya del sexo. Aquí solamente explicamos una de ellas, que los psiquiatras ignoran supinamente.

Y es extraño, porque el descubrimiento de la mente reactiva y los engramas, que provocan todos los trastornos mentales, y no solamente la "anorexia sexual", fue descubierta hace más de medio siglo por L. Ronald Hubbard, siendo el libro en el que lo ha dado a conocer un best seller mundial.

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