Por Angel Coraggio
Al peronismo se le sumó ayer formalmente otra agrupación, El   General, un espacio ampliado de justicialistas diversos, a partir   del cuarteto inicial reunido en el restaurant temático del mismo   nombre. Ayer se comprometieron no aliarse a expresiones de   centroderecha, ni a partir lanzas con el ex duhaldismo ahora   dialoguista. 
     
   En el pintoresco local gastronómico de Monserrat debieron agregar   algunas mesas, en relación con la tenida de enero, de la que   habían participado sólo los diputados nacionales Eduardo Camaño,   
   Juan José Álvarez, Francisco de Narváez y Jorge   Sarghini. 
     
   Descontracturados, a tono con el verano tardío, se sumaron Carlos   Brown, Marina Cassese, Cristian Ritondo, María del Carmen Manola   Rico, Miguel García Moreno, Alejandra Oviedo, Adrián Menem,   Stella Peso, Gustavo Ferri, Nélida Chichi Doga, Dante Saraceni,   Alberto De Fazio, Juan Carlos Bonacorsi y Carlos y Silvia   Martínez. 
     
   A grandes rasgos, se trata de un heterogéneo arco de dirigentes   unidos en torno de un antikirchnerismo entre visceral y racional,   según los casos y el estilo personal. Aparte de duhaldistas   históricos, como Camaño, Brown, los Martínez y Doga, se han   apareado a la movida dirigentes procedentes del menemismo (los   riojanos Oviedo y Menem -sobrino del ex presidente e hijo del ex   senador)-, el riquismo (Rico -hija-), el filomacrismo (Ritondo),   el PJ sistémico porteño (García Moreno) y el pattismo   (Bonacorsi). 
     
   Los muchachos de El General aseguran contar con 21 miembros,   todos diputados nacionales, aunque esperan iniciar una amplia   cosecha dirigencial en el interior del país, donde aseguran que,   aunque larvado, hay un amplio espectro de peronistas   antikirchneristas. 
     
   Ahora sí, la disidencia queda en casa. Los principales referentes   del espacio aseguran que "no hay ninguna intención de romper el   PJ, ni a nivel del bloque Federal de diputados ni en relación al   partido, tanto el nacional –intervenido– como el bonaerense   –dirigido por el peronista dialoguista José María Díaz   Bancalari–". 
     
   Tienen especial interés en puntualizar que "no hay ninguna   intención de conformar un polo para después negociar con Mauricio   Macri o Jorge Sobisch". Y señalan, con toda lógica, a Ritondo   como el principal interesado en una alianza de ese tipo; el   porteño es fogonero público de esa alternativa. 
   
 
     El General, ya como rama     interna, posó ampliado, junto al cuarteto inicial.   
 
   "El objetivo de la flamante agrupación es marcar, desde el   interior del Partido Justicialista, su propia identidad y así   establecer una posición clara sobre los temas que afectan la vida   de los argentinos", reza un breve escrito de presentación. 
     
   En rigor, cualquier política asociativa buscará darse desde una   posición de fuerza, sin vocación de furgón de cola.