13/5/2014 - Tigre: “Están privatizando cada vez más zonas”

Lucas se autodefine como un auténtico isleño, nativo del Delta. Según su testimonio, “Massa quiere hacer un Cariló en Tigre”.

La organización que integra, la Asamblea de Trabajadores Isleños 1° de Mayo, rechaza una nueva normativa que rige para las construcciones en las islas. Según este grupo de vecinos, “la norma no contempla los usos y costumbres de los isleños de toda la vida”, como la autoconstrucción de viviendas o la instalación de muelles.

Se trata de la ordenanza N ° 3345, promulgada en marzo de este año, que regula “cuestiones relativas a la estructura, forma, seguridad y salubridad de las construcciones” en las islas.

Los isleños quieren impedir que la normativa entre en vigencia y ya realizaron movilizaciones frente a la Municipalidad.

Ante la consulta por este reclamo, desde la gestión de  Sergio Massa señalaron: “Si bien el 1º de agosto es la fecha de aplicación de la normativa, la misma sería prorrogada por un plazo prudencial para alcanzar el mayor consenso posible ante la diversidad de pedidos que existen”.

El Puerto de Frutos no está excluido de los reclamos. En esta línea, otro isleño denunció: “Lo están convirtiendo en un shopping. Ahí no hay más isleños, ni frutos”.

En la municipalidad desmintieron esa versión y respondieron: “En el puerto se está trabajando arduamente para mantener su identidad, para que vecinos como visitantes puedan ver su valor y su historia”.

Desde El Talar, Fernando señaló que la villa en donde vive, es uno de los 22 asentamientos que tiene Tigre, el paisaje menos atractivo del municipio. “Están privatizando cada vez más zonas”, dijo este vecino. Además, aseguró que es creciente la ocupación de la ribera por parte de privados que impiden el acceso público al río.

Por su parte, Valentín Callamullo es uno de los representantes de las comunidades originarias que aún viven en Tigre, que están en lucha por la defensa de la zona arqueológica de Punta Querandí, un terreno de sólo media hectárea que quiere ser ocupado por privados.

Desde la gestión de Sergio Massa señalaron que “los privados que desarrollan e invierten en Tigre hacen sólo si cumplen con las leyes y ordenanzas vigentes”. Sobre la zona arqueológica, aseguraron que convocaron a una mesa de diálogo entre los pueblos originarios y la empresa constructora para alcanzar un acuerdo.