Sociedad | Clima
El frío más crudo del año golpea con fuerza a la Patagonia, donde se registraron temperaturas de hasta -18°C, nevadas intensas y rutas intransitables. El fenómeno se extendería en las próximas horas hacia el centro del país.
Una ola polar de características excepcionales afecta al sur argentino, con registros térmicos extremos que transformaron paisajes y alteraron la vida cotidiana de miles de personas. Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), el fenómeno tuvo su epicentro este jueves en la provincia de Santa Cruz, donde se alcanzaron -18°C en la base aérea El Calafate, y -12.4°C en Río Gallegos.
Las imágenes que llegaron desde El Chaltén, El Calafate, San Martín de los Andes y Villa La Angostura mostraron un escenario de postal: calles cubiertas de nieve, techos blancos, autos sepultados por los copos y turistas atrapados en plena aventura. Sin embargo, el encanto invernal también se tornó preocupación: muchas rutas permanecen cerradas o con tránsito reducido, y se multiplicaron los pedidos de asistencia en localidades pequeñas.
El SMN advirtió que esta ola polar —producto de una masa de aire de origen antártico— se desplazará hacia el norte en los próximos días, alcanzando las provincias del centro del país con mínimas que podrían perforar los -5°C en zonas rurales.
El fenómeno no sólo marca récords de bajas temperaturas, sino que también reabre el debate sobre la precariedad en la infraestructura vial y energética para enfrentar estos eventos extremos. El frío no es novedad, pero su intensidad y persistencia exigen políticas de prevención más robustas, sobre todo para los sectores vulnerables.
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