07/10/2006 - Buenos Aires - "Lo único que buscan es presionar al Gobierno y a la propia opinión pública para que se aumenten las tarifas a los sectores residenciales. Y eso el Gobierno no lo va a hacer", aseguró De Vido, en declaraciones a radio Diez, de Buenos Aires.
El ministro insistió en que no existe en el país una crisis en el sector energético y negó que el Gobierno analice solicitar a los empresarios locales que restrinjan el consumo en estadios de fútbol, centros comerciales y espectáculos, tal como habían indicado algunas versiones.
"Los argentinos deben estar tranquilos y disfrutar de la vida", señaló el alto funcionario al ratificar que no existe una crisis en el sector y que se trata de una operación "avalada muchas veces por algunas compañías energéticas".
Sin embargo, algunos expertos han advertido sobre la posibilidad de que se repita una crisis por falta de energía como la registrada en 2004, debido al aumento de la demanda en los últimos años como consecuencia del crecimiento de la economía local.
Para evitar un nuevo colapso, el Gobierno lanzó un Plan Energético que incluye la terminación de las obras en la central hidroeléctrica argentino-paraguaya de Yacyretá, la conclusión de la central atómica Atucha II y la construcción de dos nuevas centrales térmicas.
Además, la Administración de Néstor Kirchner anunció el pasado martes un plan de inversión por 650 millones de pesos (208,3 millones de dólares) para expandir la capacidad de generación de dos centrales eléctricas, en las ciudades de Mar del Plata y Villa Gesell.
"Hacía más de cinco años que no se adoptaban decisiones de esta magnitud", dijo De Vido. EFE