20/05/2009 - La acusación reveló que los corredores de bolsa de Joseph Stevens & Company, Inc. llevaron a cabo su fraudulento plan de comisiones ilegales entre 2001 y 2005, cuando estafaron a 800 víctimas en transacciones valoradas por más de 150 millones de dólares, indicó la fiscalía en un comunicado.
Los corredores de esta empresa de valores manipulaban el valor del mercado en determinadas acciones, incrementando su precio real para cargar ilegalmente grandes comisiones a los compradores.
"La mayor parte de los clientes afectados por el mal comportamiento de los acusados eran personas mayores jubiladas o a punto de jubilarse y sus acciones forzaron a algunas de las víctimas a tener que volver a trabajar para sobrevivir", afirma el comunicado.
Además, los 16 trabajadores de la empresa neoyorquina inflaban el precio de la acción para que fuera más alto después de haber acordado la adquisición con sus clientes, quienes en muchas ocasiones perdieron grandes cantidades después de adquirir los valores recomendados por estos corredores. EFE