28/06/2009 - De Narváez habría conseguido hoy prácticamente un empate técnico con Néstor Kirchner en la provincia de Buenos Aires, al quedarse a menos de 3 puntos del ex presidente en las elecciones legislativas, según los sondeos de urgencia a pie de urna.
Nacido en Colombia, el 22 de septiembre de 1953, De Narváez -o "el colorado" como lo llaman sus seguidores por ser pelirrojo- se lanzó a la caza del voto conservador, del elector peronista opositor a la conducción de Kirchner en el Partido Justicialista (PJ) y también del votante desencantado con el gobierno de Cristina Fernández.
Hijo de Doris Steuer y Juan de Narváez, un colombiano dedicado al negocio del café, abandonó con tres años su Bogotá natal para establecerse en Argentina, donde obtuvo la nacionalización en 1983.
Su fortuna le viene de herencia familiar. Su abuelo materno, Karel Steuer, tenía una cadena de tiendas de regalos para niños en Europa del Este llamada "Te-ta", que en checo significa "Tía", nombre que adoptó cuando se estableció en Argentina, donde transformó el negocio en un grupo de supermercados.
De Narváez ingresó a la empresa familiar a los 17 años y llegó a la dirección en 1989, cargo que ocupó por diez años hasta la venta de Casa Tía.
Su carrera empresarial se diversificó en 2002, cuando adquirió La Rural, firma que administra el mayor centro ferial de Buenos Aires y es un símbolo de la burguesía agrícola-ganadera argentina.
Es, además, dueño del canal América de la televisión abierta de Buenos Aires y del diario económico El Cronista.
"Un día dejé de lado la indiferencia, dejé de quejarme y me puse a trabajar para cambiar la situación del país. A mi entender, el mayor error era la falta de participación de la clase empresaria", relata el empresario en su sitio web.
Si incursión en la política comenzó tímidamente en 2001 a través de la Fundación Unidos del Sud y siguió con su afiliación al Partido Justicialista, paso que, asegura, no fue más que formalizar como siempre se sintió: peronista.
Ligado inicialmente al ala liderada por el ex presidente Carlos Menem (1989-1999), llegó a ser diputado por la provincia de Buenos Aires en 2006 y dos años después obtuvo el tercer puesto, con un millón de votos, para su postulación como gobernador del mismo distrito en una alianza de peronistas conservadores con la centro-derechista Unión Pro.
Esta fuerza, que lidera el alcalde de Buenos Aires, Mauricio Macri, ha vuelto a acompañarlo en los comicios legislativos de hoy.
En esta campaña, De Narváez ha lidiado con acusaciones de supuestos vínculos con capos del narcotráfico y descalificaciones del oficialismo.
La prensa local especula que su fortuna alcanza los 200 millones de dólares y que ha gastado unos 230.000 dólares diarios en su omnipresente campaña electoral.
"Soy un tipo común" y "tengo un plan" fueron las muletillas proselitistas de este político conservador que dice identificarse con los modelo de los presidentes José Luis Rodríguez Zapatero, de España, y Barack Obama, de Estados Unidos.
Inconfundible por el tatuaje de una serpiente en el cuello, asegura que su máxima ambición política no es presidencial sino gobernar la provincia de Buenos Aires, aunque pocos le creen.
Casado en segundas nupcias con la abogada y ex modelo Agustina Ayllón (37 años), con cinco hijos y un sexto en camino, De Narváez ha reconocido que intentó suicidarse en la habitación de un hotel de lujo en 1992, una época en la que era un adicto al trabajo y de la que salió gracias al afecto familiar. EFE